Ejercicio
¿Es recomendable entrenar cuando estamos enfermos, según la ciencia?
¿Entrenar o descansar? La ciencia te ayuda a decidir si debes hacer ejercicio cuando estás enfermo04 de julio, 2024 | 08:00 p.m.Entrenamiento y Salud | Descubre cuándo deberías suspender tu rutina de ejercicio. Fuente: Freepik
En medio de la temporada de resfriados y gripe, muchos entusiastas del ejercicio se preguntan si es prudente continuar entrenando cuando están enfermos.
Aunque la sabiduría popular a menudo sugiere reposo absoluto, la ciencia revela que el deporte sigue siendo un ejercicio efectivo incluso durante la enfermedad.
Según un estudio revisado por Cochrane Database of Systematic Reviews, el ejercicio de intensidad moderada no solo es seguro, sino que puede reducir la gravedad de los síntomas de las infecciones respiratorias superiores y acortar su duración.
¿Cuándo uno está enfermo puede hacer ejercicio?
Ubicación de los síntomas
- Si tienes congestión en el pecho, dolor en el cuerpo o malestar general, descansa hasta que te sientas mejor y recuperes energías.
- Si solo tienes secreción nasal, dolor de garganta o tos leve, puedes realizar ejercicio de baja a moderada intensidad.
Intensidad del ejercicio
- Ejercicio de baja a moderada: Como caminar, hacer yoga suave o levantar pesas ligeras, puede ser beneficioso, ayuda a mejorar la circulación, el estado de ánimo y ayudar a combatir la infección.
- Ejercicio intenso: Este tipo de ejercicio puede aumentar la temperatura corporal y empeorar los síntomas.
¿Qué precauciones se deben tomar al hacer ejercicio mientras se está enfermo?
- Es crucial escuchar al cuerpo y evitar cualquier ejercicio que cause fatiga excesiva o malestar.
- El ejercicio de alta intensidad o prolongado puede disminuir la inmunidad celular y no es recomendable durante la enfermedad.
- Además, es importante asegurarse de no ser contagioso antes de volver a un entorno compartido como un gimnasio.
- Mantente hidratado ya que la deshidratación te hace más susceptible a las complicaciones de la enfermedad.
Escuchar al cuerpo y adaptar el ejercicio según las necesidades individuales.
Transformar tu living en un gym con las herramientas adecuadas puede facilitar mantener un estilo de vida activo incluso durante la recuperación, siempre priorizando la salud y el bienestar personal.