3 consejos para entrenar si tienes más de 50 años
Entrena tu cuerpo de manera segura teniendo algunos recaudos presentes.A medida que alcanzamos la edad de 50 años, es común preguntarse sobre la importancia del ejercicio y cómo adaptar la rutina de entrenamiento para mantener un estilo de vida activo y saludable. Si bien no necesariamente entrenar implique complicaciones, es mejor tocar algunos recaudos.
Algunos pueden pensar que es hora de reducir la intensidad del entrenamiento o incluso dejar de hacer ejercicio por completo. Sin embargo, numerosos estudios respaldan los beneficios continuos de mantener una rutina de entrenamiento después de esta edad.
El ejercicio regular contribuye a mantener la salud cardiovascular, reduciendo el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. El entrenamiento de resistencia ayuda a contrarrestar la pérdida de masa muscular relacionada con la edad, mejorando la fuerza y la capacidad funcional.
Si lo que buscas es mejorar la movilidad, actividades como el yoga y el estiramiento contribuyen a la flexibilidad y la movilidad, facilitando la realización de actividades diarias.
Realiza estos tres pasos para entrenar de manera segura después de los 50 años
- Modifica tus objetivos: Lo primero que debes hacer es cambiar por completo tus objetivos de entrenamiento. No es lo mismo hacer actividad física a los 20 años que hacerlo a los 50, sin importar que hayas llegado a esta edad con una excelente condición física.
- Planifica los días de descanso: Las jornadas de descanso están infravaloradas entre los atletas amateurs. Entrenadores profesionales y médicos deportivos no dejan de señalar su importancia para asegurar la recuperación muscular.
- Explora otras disciplinas y entrenamientos: En parte te preparas para el cambio gradual que harás la próxima década. Poco a poco aprendes que algunas actividades sutiles pueden aportarte más de lo que crees, así como hacerte explorar nuevas experiencias, emociones y desafíos.
Entrenar después de los 50 no solo es beneficioso para la salud física, sino que también contribuye a un envejecimiento activo y pleno. Con una rutina adaptada y enfoque consciente, es posible disfrutar de los muchos beneficios que el ejercicio ofrece a cualquier edad.