Atención mujeres mayores de 40, esta es la mejor sentadilla que puedes hacer

Las mujeres de 40 años a menudo se encuentran buscando formas efectivas de mantenerse en forma y saludables. En este camino hacia la salud y el bienestar, los ejercicios de fuerza han cobrado un papel cada vez más importante en la vida de las mujeres.

Uno de los ejercicios que se ha destacado en los últimos años es la sentadilla, y hoy te contaremos por qué es fundamental.

Durante mucho tiempo, hubo un mito persistente de que las mujeres deberían evitar los ejercicios de fuerza para no desarrollar una apariencia “musculosa”.

Sin embargo, los expertos han reevaluado estas creencias, y ahora se reconoce que los ejercicios de fuerza son esenciales para mejorar la salud y la calidad de vida de mujeres de todas las edades.

Cómo se hace la sentadilla perfecta

• Romper el paralelo de los 90° con las rodillas: Lo primero que hay que hacer es colocar los pies encima de la cuña, lo más arriba posible. Esto es importante porque de esta forma ayudamos a tener una postura más controlada.
• El segundo paso es coger el peso con las dos manos, tal y como se explica en el vídeo.
• El tercer paso es bajar todo lo que puedas poco a poco, en sentadilla, con la espalda recta, sin arquear el lumbar. En ese momento hay que asegurarse de que los glúteos casi toquen los talones.
• El cuarto paso es subir igual, poco a poco.

Esta forma óptima te permitirá maximizar los beneficios de este ejercicio y asegurarte de que estás trabajando los músculos adecuados.

La sentadilla se ha convertido en uno de los ejercicios más recomendados. Este movimiento de cuerpo completo no solo fortalece las piernas, sino que también trabaja los glúteos, la espalda baja y el core. Esto es esencial para mantener un equilibrio muscular adecuado y prevenir lesiones relacionadas con la edad.

La sentadilla no solo se trata de fuerza física; también implica fuerza mental. A medida que las mujeres de 40 años incorporan este ejercicio a sus rutinas, se dan cuenta de la confianza y el empoderamiento que provienen de superar desafíos físicos.