Estas son las variaciones de las tortas en la República Mexicana

La torta es uno de los alimentos más populares de la República Mexicana, pues además de ser fácil de preparar se le puede poner casi con cualquier ingrediente y su impacto en el paladar no deja de ser exquisito.

Tal es el caso de la que lleva en su interior gelatina, que se convirtió en uno de los postres preferidos de los capitalinos pese a la extraña combinación de texturas.

En los estados del interior del país a veces critican a los ‘chilangos’ por comer bolillo a la menor provocación, por eso hemos decidido hacer un recuento en honor a todo lo que se le puede agregar a un pan partido por la mitad.

¿Y es que cómo olvidar la etapa escolar en la que llevábamos una deliciosa y llenadora torta de jamón para almorzar a la hora del recreo, justo antes de jugar con los compañeros?

Por eso a continuación hablaremos de las variaciones de tortas que hay en la nación y que, sin exigir tanto presupuesto de nuestro bolsillo, podemos preparar en la comodidad del hogar.

Estas son las variaciones de las tortas que se consumen en México

TORTA CUBANA

Se trata de una de las más ‘atascadas’, pues suele tener un enorme tamaño debido a que se le echan todos las carnes frías y embutidos que se puedan.

Su consumo es frecuente en la zona centro del país y quienes las elaboran suelen ponerles ingredientes como chorizo, pierna, quesillo, salchicha, milanesa, jamón, huevo, pollo, etcétera.

TORTAS DULCES

No sólo existe la de gelatina, también están aquellos bolillos partidos a la mitad a los que les podemos untar cajeta, mantequilla con azúcar, mermelada o hasta de plátano.

TORTAS DE LA BARDA

Creadas aproximadamente en el año 1928 por José María Bracamontes, adquirieron ese nombre porque se vendían cerca de la barda de la aduana de Tampico.

Originalmente se les agregaba sardina, pero con el paso de los años les fueron poniendo frijoles, jamón, queso de puerco, queso amarillo y molido, carne deshebrada de res, chorizo, aguacate, una salsa picosita de chile verde y chicharrón prensado.

TORTA AHOGADA

Esta variante se vende principalmente en Guadalajara, Jalisco, y destaca por ser la más picosa de todas las que se comercian en la República Mexicana.

Se preparan con birote salado, carnitas, cebolla y una salsa de chile de árbol. No obstante, para quienes no consumen mucho picante hay la opción de cubrirlas con caldillo de jitomate.

TORTA GUACAMAYA

Surgieron en León, Guanajuato y consisten en un bolillo partido a la mitad al que se le agrega chicharrón de cerdo, una salsa de jitomate, cebolla, chile y aguacate.

TORTA TECOLOTA

Este es uno de los delirios de los capitalinos, quienes no sólo disfrutan de comer ‘guajolotas’ (que son bolillos con un tamal por dentro).

La tecolota es una de las variaciones de las tortas en la República Mexicana a la que se le agregan nada más y nada menos que chilaquiles, verdes o rojos. Aunque son un desayuno frecuente, también se emplean para ‘bajar la cruda’.