Entrenar antes de dormir: ¿es un mito o una realidad que produce insomnio?

Muchas personas buscan algún momento libre en sus vidas para poder realizar algo de ejercicio para despejar la cabeza, distender de las obligaciones o simplemente sentirse mejor. En el mundo acelerado de hoy, encontrar tiempo para el ejercicio se convierte en una batalla diaria.

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En la época del verano, muchas personas evitan el calor del día, por lo que también buscan hacer ejercicio de noche.

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Muchos optan por dejar la actividad física para el final del día, buscando aprovechar los últimos minutos antes de irse a la cama. Pero, ¿es realmente una buena idea entrenar antes de dormir? La respuesta, como en muchas cosas, no es tan simple.

¿Hacer ejercicio de noche, produce insomnio?

• La creencia popular sugiere que el ejercicio nocturno podría afectar negativamente la calidad del sueño, dificultando la conciliación del descanso.
• Sin embargo, un estudio reciente, titulado “Los efectos del ejercicio nocturno de alta intensidad sobre el sueño en adultos sanos: una revisión sistemática y un metanálisis”, arroja luz sobre este tema.

• El mencionado estudio fue realizado analizando los efectos del ejercicio de alta intensidad (HIE) en el sueño de adultos sanos.

El ejercicio de alta intensidad y el sueño: ¿qué dice la ciencia?

• El estudio, realizado con una muestra de 194 participantes de entre 18 y 50 años, con diferentes niveles de actividad física, analizó los efectos del HIE realizado entre 0.5 y 4 horas antes de dormir.
• Los resultados mostraron que, en general, el ejercicio de alta intensidad realizado menos de una hora antes de acostarse puede dificultar la conciliación del sueño, reduciendo el tiempo de descanso REM.

• Sin embargo, el estudio también reveló que realizar ejercicio de alta intensidad dos o más horas antes de dormir no interfiere con la calidad del sueño, e incluso puede mejorar la duración del descanso.

Cuándo hacer el ejercicio, la clave del asunto

• La respuesta a la pregunta de si entrenar antes de dormir es bueno o malo depende del tiempo que transcurra entre la actividad física y la hora de dormir.
• Si bien el ejercicio de alta intensidad realizado cerca de la hora de acostarse puede afectar negativamente el sueño, realizarlo con un margen de dos horas o más no parece tener un impacto negativo en la calidad del descanso.

• Es importante recordar que el sueño es vital para la salud y el bienestar, y que la restricción del mismo puede tener consecuencias negativas para el organismo.
• Por lo tanto, la mejor recomendación es encontrar un equilibrio entre la actividad física y el descanso, adaptando el horario de entrenamiento a las necesidades individuales y buscando siempre la mejor forma de optimizar la calidad del sueño.

Además, muchos entrenadores recomiendan adoptar otros hábitos saludables, como la buena alimentación y ser consistentes con el entrenamiento, para conseguir convertirse en una persona activa, derrotando así al sedentarismo.