7 consejos para evitar los trastornos del sueño después de los 34 años
La mayoría de los adultos a esta edad tienen problemas para dormir. Aprende a evitar la falta de sueño.
Los trastornos de sueño empiezan pasado los 30 años, alrededor de los 34 años y esto tiene que ver con el paso del tiempo, el estrés, las obligaciones laborales y las exigencias del mundo actual que hacen que dormir se convierta en una dificultad difícil de lograr.
Si bien sabemos que dormir es tan importante como comer, muchas veces no le prestamos la atención suficiente y nuestros hábitos de sueño dejan mucho que desear, donde le quitamos horas a nuestro descanso por completar alguna actividad que es lo que se conoce como procrastinación del sueño.
Los problemas de la falta de sueño
- Cansancio o fatiga
- Dolor de cabeza
- Mal humor o irritabilidad
- Problemas de atención, concentración o memoria
- Somnolencia diurna
- Falta de motivación o
- Preocupación o insatisfacción con el sueño
- Dificultades de rendimiento académico o laboral
- Complicaciones en la conducta como hiperactividad o impulsividad
- Propensión a cometer errores o accidentes
- Siendo la mayoría de los síntomas más frecuentes en mujeres, salvo los problemas de impulsividad y la propensión a errores y accidentes, que son más habituales entre los hombres.
Consejos para dormir bien
- Duerme las horas necesarias, se calcula un promedio entre 7 y 9 horas como ideales. Valora el tiempo de sueño que necesitas para despertar descansado y estar en las mejores condiciones físicas y mentales al día siguiente.
- Intenta mantener un horario regular: levantarte siempre a la misma hora y acostarte cuando notes somnolencia por la noche. Evita que la diferencia sea de más de una hora entre los días festivos y los laborables.
- Procura mantener unas buenas condiciones ambientales en el dormitorio: la menor cantidad de luz posible, temperatura agradable, sin ruidos, ropa cómoda, colchón y almohada adecuadas.
- Utiliza la cama solo para dormir y tener relaciones sexuales.
- Deja el móvil fuera de la habitación para evitar la tentación de mirarlo antes de dormir y durante los despertares nocturnos. En general, procura dejar de usar dispositivos electrónicos (teléfonos inteligentes y tabletas) entre media hora y una hora antes de acostarte.
- Intenta cenar unas 2 o 3 horas antes de acostarte y evita ingerir alimentos abundantes y pesados.
- Reduce el consumo de sustancias estimulantes (café o té) en las últimas horas del día. Los expertos desaconsejan las bebidas energéticas.
Si sigues estos consejos, probablemente recuperarás tus horas de sueño y lograrás sentirte mejor al día siguiente, ya que amanecerás descansado y predispuesto a enfrentar todas las actividades de tu día, con la energía suficiente para que sea una jornada feliz y productiva.