3 consejos para romper el sedentarismo y empezar a entrenar después de los 40 años
Llegar a los 40 años no significa que debas resignarte a una vida sedentaria. Si bien el cuerpo experimenta cambios con el paso del tiempo, la actividad física sigue siendo fundamental para mantener una buena salud y calidad de vida.La vida después de los 40 años puede ser una etapa maravillosa, llena de nuevas experiencias y oportunidades. Sin embargo, también es un momento en el que es importante cuidar tu salud más que nunca.
La OMS recomienda que los adultos de entre 40 y 59 años realicen al menos 150 minutos de actividad física moderada o 75 minutos de actividad física vigorosa a la semana.
3 consejos para romper el sedentarismo
Hazte un chequeo médico
- Si tienes alguna condición médica preexistente, es fundamental realizar este control médico.
- Es importante realizar un chequeo médico para asegurarte de que no haya contraindicaciones.
- El médico podrá evaluar tu estado de salud y recomendarte las actividades más adecuadas para ti.
Ejercicio físico de forma gradual
- No intentes entrenamiento exigentes y evita el impacto.
- Comienza con ejercicios de baja intensidad y corta duración.
- Incrementa gradualmente la intensidad y la duración a medida que te vayas poniendo en forma.
- Trabaja patrones básicos de movimiento con posturas que aplicas en la vida cotidiana.
Alimentación saludable
- Aplica la dieta DASH, que es baja en grasas totales, grasas saturadas y colesterol.
- Rica en frutas, verduras y productos lácteos sin grasa o bajos en grasa
- Este plan de alimentación destaca los productos integrales, el pescado, la carne de ave y los frutos secos.
Romper el sedentarismo y empezar a entrenar después de los 40 años no solo es posible, sino que también es esencial para mantener una buena salud y prevenir enfermedades.
No importa si nunca has realizado ejercicio antes o si has estado inactivo durante un tiempo. La actividad física regular te ayudará a mejorar tu estado cardiovascular, muscular y óseo, así como tu salud mental y tu calidad de vida.