3 ejercicios que puedes hacer en la oficina sin que tu jefe lo note
Estar mucho tiempo sentado puede causarnos molestias que con simples movimientos podemos evitarSuelen ser muchas las horas que nos pasamos frente a un escritorio, quietos, mirando una computadora o trabajando en una hoja de cálculo.
Esto nos trae aparejados que nuestro cuerpo se rigidice e incluso algunas molestas contracturas y dolores en espalda y cervicales.
Estar mucho tiempo sentados en la misma posición provoca inflamación en el cuerpo que podemos evitar si cada, 30 minutos, hacemos alguna pequeña actividad.
A fin de que hagas ejercicio en tu oficina sin que tu jefe o tus compañeros de trabajo lo noten te dejamos unos ejercicios que puedes realizar mientras trabajas.
Los 3 ejercicios que puedes hacer en la oficina
- El primero de los ejercicios que te proponemos son los abdominales hipopresivos.
- La primera finalidad de estos ejercicios, para lo que fueron creados fue para recuperar el tono muscular del suelo pélvico en las mujeres tras el parto.
- Pero resultaron ser ideales para todos puesto que refuerzan el cinturón abdominal e incluso mejoran la vida sexual.
- Realizarlos lleva pocos minutos y nadie notará que los estás haciendo. Para ello, respira profundamente tres veces, y en la última exhala todo el aire de los pulmones.
- Sin respirar, abre las costillas como si quisieras tomar aire, con lo que tu ombligo se hundirá. Mantén esta posición 10 segundos y repite todo el proceso.
- La segunda propuesta es que te levantes cada vez que hables por teléfono.
- Muévete de un lado al otro y hasta camina al mantener una llamada.
- Puedes aprovechar las llamadas largas para subir escaleras o dar un pequeño paseo, mientras aún continúas trabajando.
- De esta manera tendrás un momento de ejercicio activo sin que nadie lo note.
- El último de los ejercicios que te proponemos en esta nota es que aproveches la mesa de la sala de reuniones y la uses para hacer como si la levantaras.
- Con esto estarás haciendo un importante ejercicio isométrico con el que trabajarán tus brazos.
- Obviamente, la idea es que nadie lo note, no pongas cara de fuerza y presta a tención a lo que están hablando.
- Si la mesa es muy liviana, usa tu escritorio, lo importante es que movilices tus músculos y no el lugar donde lo hagas.
- Cuando realices este ejercicio, mantén la tensión todo el tiempo que puedas, descansa 30 segundos y repite.
Si realizas estos pequeños movimientos, estarás ayudando a tu cuerpo a mantenerse sano y activo, potenciando los ejercicios que realizas en el gimnasio y dándole la oportunidad a tu organismo de sentirse y verse cada vez mejor.