El deseo sexual es una fuerza poderosa que nos impulsa y nos conecta con los demás. Es una parte integral de nuestra identidad y bienestar, y juega un papel fundamental en nuestras relaciones.
Para que esta llama se mantenga viva, es necesario cuidar nuestro cuerpo y nuestra mente. La salud es el pilar fundamental del deseo sexual.
Una buena salud física y mental nos proporciona la energía, la vitalidad y la confianza necesarias para disfrutar del sexo.
El deseo sexual puede disminuir durante la menopausia debido a los cambios hormonales, pero puede recuperarse con tratamiento adecuado y una actitud positiva.
La testosterona, la hormona masculina, disminuye con la edad, lo que puede afectar el deseo sexual. Sin embargo, esto no significa que el sexo no sea placentero o imposible.
¿Qué factores influyen en el deseo sexual?
Biológicos: La edad, los niveles hormonales, la salud física y la genética influyen en la capacidad de respuesta sexual.
Psicológicos: El estado de ánimo, la autoestima, el estrés y la satisfacción con la vida en general impactan en el deseo sexual.
Sociales: Las relaciones de pareja, la comunicación, la cultura y las expectativas sociales también juegan un papel importante.
Licenciada en Comunicación Social egresada de la Universidad Juan Agustín Maza. Me desempeñé durante siete años como Coordinadora de Desarrollo Social en la Municipalidad de Las Heras, Mendoza, Argentina. Diplomada en Marketing Digital por la Universidad de Cuyo. Me apasionan los deportes, especialmente el fútbol y el futsal.