Para que tus hot cakes queden súper esponjocitos, como los de un chef experto en este rico manjar, sigue los sencillos consejos que a continuación te presentamos.
Agrega una cucharada de vinagre blanco a tu mezcla de harina para hot cakes. Debes tomar en cuenta la cantidad de masa que tienes, para que no le gane el sabor del vinagre.
Claras a punto de turrón
Bate a punto de turrón las claras del huevo y mezcla en un traste aparte las yemas, leche y harina. Una vez que estén listas las claras, incorpóralas de forma envolvente con el resto los ingredientes.
Es importante que la leche esté a temperatura ambiente al momento de mezclarla, ya que el frío dificulta que los hot cakes se esponjen.
¡Cuidado con el fuego!
Para cocinar los hot cakes la flama no debe estar alta ni baja, sino media-baja, y el sartén precalentado con un poco de mantequilla o la grasa de tu preferencia.
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Tapa los hot cakes
Después de que eches la mezcla al sartén, tápalo, espera a que la masa burbujee y la orilla del hot cake esté dorada para voltearlo, así quedará esponjocito y, además, tendrá una corteza lisa.
Elige el mejor satén
Cocina los hot cakes en un sartén antiadherente, así usarás menos grasa y quedarán esponjosos, ya que la grasa evita que la masa suba como debe hacerlo.
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Haz la mezcla un día antes
Sabemos que cuando nace el antojo de hot cakes es prácticamente imposible esperar a comerlos, pero si preparas tu mezcla un día antes, los ingredientes se integrarán mejor y los hot cakes quedarán súper esponjosos.
