Seas team frío o team calor, con las temperaturas que hemos tenido estas últimas semanas se antojan unas buenas bebidas preparadas. Las micheladas siempre son una buena opción cuando piensas en algo refrescante. Ya sean solas o con un buen tarro preparado con clamato y chamoy. Si no las sabes preparar, no te preocupes pues es mucho más fácil de lo que crees.
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Para tu michelada con clamato necesitas:
1 tarro grande
1 cerveza bien fría
4 onzas de clamato (dos caballitos aprox.)
1 o 2 limones por tarro
1 cucharadita de salsa inglesa
1 cucharadita de chamoy (para la mezcla de adentro)
Debes comenzar haciendo una mezcla de tu chamoy para escarchar, chile en polvo y sal en un platito extendido, esto debe quedar un poco espeso. Después, en otro plato, haces una mezcla solamente son sal y chile en polvo.
Teniendo tus dos platos listos, pasa la boca de tu tarro por la mezcla con chamoy. Una vez bien impregnado, pásalo por el plato con sal y chilito en polvo.
Con tu tarro bien escarchado, agrega hielo a tu gusto. Seguido por tu clamato, el chamoy, salsa inglesa y el limón. Finaliza tu creación vertiendo con cuidado tu cerveza, porque por el hielo es posible que se desborde y se lleve consigo toda tu escarcha. Si gustas ponerle alguna fruta o algo más como topping, este es tu momento de ponerte creativo.
¡Y listo! Ya tienes un remedio infalible en contra del calor. Esta michelada es ideal para servirse con amigos, con unas buenas alitas o hamburguesas y acompañar con buena música.
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Se acerca el fin de semana, y esta michelada con clamato y chamoy es ideal para poner pretexto y juntarte con todos aquellos que llevas un rato queriendo ver.
