Teniendo esto en cuenta, podemos decir que el baile implica una variedad de movimientos que trabajan diferentes grupos musculares. Los músculos se fortalecen y esculpen de manera natural, contribuyendo a una figura más esbelta.
Bailar no solo impacta positivamente el cuerpo, sino también la mente. La liberación de endorfinas durante la actividad física ayuda a reducir el estrés y mejora el estado de ánimo. La música y el movimiento se convierten en una forma de expresión que alivia tensiones y proporciona una sensación general de bienestar.
Si tu idea es iniciar en clases de baile o eventos sociales relacionados con el baile, tienes que saber que no solo proporciona un ambiente motivador, sino que también fomenta la socialización.
Según los resultados de profesionales, “El baile creativa es el tipo de baile que proporciona mayores beneficios en la composición corporal y la pérdida de grasa. En cambio, el impacto de la danza tradicional es bastante menor. Este mayor efecto podría deberse, según los autores, a que la danza creativa se enmarca dentro de la evolución actual del baile, marcada por los avances.
Los investigadores resaltan que el baile se debe practicar durante un periodo de al menos tres meses para que se puedan apreciar cambios sustanciales en la composición corporal que se traduzcan en una pérdida de masa grasa.
La principal ventaja que aporta el baile como ejercicio físico aeróbico es que, al tener un fuerte componente de diversión, la tasa de abandono es menor que con otras actividades. Los investigadores concluyen que es especialmente adecuado como alternativa a los protocolos tradicionales de ejercicio en jóvenes con sobrepeso u obesidad.
La conexión con otros grandes bailarines, aunque a veces piedo que ya estoy grande para eso jajajaj. Para no sentirte sola durante tu ducha, se esta quedando son su padre, estas mini vacaciones que se tomaron.
