Tamales oaxaqueños, tamales calientitos: ¿Quién está tras la voz de esta frase?
Aunque no lo creas, uno de los sonidos más conocidos de esta ciudad tiene nombre y rostro. Hoy te lo presentamos.
Si la Ciudad de México fuera una película, en su banda sonora hay marcas registradas. Está el "tururú" del metro, también "el panadero con el pan", que viste a la capital de un sonido que evoca la suavidad de una concha de chocolate y por supuesto el lema "tamales oaxaqueños, tamales calientitos". Si creías que este último himno a los chilangos moriría en el anonimato, hoy te contamos quién está tras la voz de la frase.
La leyenda solo habla de un tipo de tamal, pero la realidad es que el carrito que carga con todos esos regalos de masa bañados en salsa suelen ser de muchos sabores. Claro que están los llegados desde Oaxaca, pero también hay verdes, de mole, rajas y para los niños de casa, los clásicos dulces con su vestimenta rosa.
¿Quién está tras la frase 'Tamales oaxaqueños, tamales calientitos'?
La famosa frase tiene un pasado jarocho. Nació en Veracruz gracias a la voz de Elías Zavaleta. En una entrevista para Letras Libres en el ya lejano 2009 Zabaleta dijo que sabe que los tamaleros de todo el país han entendido que su lema es la carnada perfecta para quienes quieren degustar un delicioso antojito mexicano; pero también conoce que un casete con su leyenda cantadita puede valer hasta 300 pesos.
Elías comentó que grabó el peculiar sonido cuando apenas tenía 17 años, hoy debe tener 47. Sin embargo, en un principio su voz solo era una de las candidatas, aunque al final se llevó el premio mayor. Abundó en que la idea surgió porque antes viajaban mucho para vender por lo que acababan cansados o con la garganta lastimada y ya no podían gritar.
Entonces uno de sus tíos tuvo la idea de grabar una pequeña frase para ahorrarse ronqueras. Indicó que al igual que él, sus amigos también lograron hacer un intento, pero nadie lo venció. "A lo mejor gané porque (mi voz) es más fuerte", subrayó.
Acerca de la comercialización de su material, refirió que comenzó cuando se salió de casa para vender en otra colonia con uno de sus amigos. Él tenía guardado el casete en sus cosas, pero otro amigo lo encontró y se lo pidió para vender. La cinta acabó en las manos de su patrón y él, sin pedir permiso, comenzó el "reguero" de grabaciones.
Aunque le da gusto ser famoso, sin que le pidan un autógrafo, y que sus amigos se ganen la vida con sus cuerdas vocales, también se siente frustrado de ver que se hacen comerciales y productos publicitarios que no le dan ni un peso por los derechos.
Así, la voz de "tamales oaxaqueños, tamales calientitos", finalizó diciendo que a veces ya no siente nada de escucharse con los tamaleros, aunque de vez en cuando, a quienes no lo conocen, les pregunta de dónde sacó la grabación. Actualmente, Elías además de vender tamalitos, comercializa tacos de canasta.