Normalmente antes de dormir o antes de aplicar maquillaje, trabajamos la piel hidratándola, para lograr un aspecto más fresco y rejuvenecido. Invertimos grandes cantidades de dinero para vernos cada día con una piel más lozana y bella, pero muchas veces olvidamos o desconocemos la importancia de los ejercicios.
Así como nuestro cuerpo necesita ejercitarse y tener una rutina de entrenamiento para estar tonificado y verse juvenil, nuestro rostro se puede beneficiar de la misma manera con una pequeña rutina de Yoga Facial que redundará en magníficos beneficios rejuvenecedores en nuestra piel.
Para esto con los pies apoyados en el suelo, coloca tu mano derecha sobre la oreja izquierda, llevando tu cabeza hacia el hombro derecho.
Extiende tu mano izquierda hacia abajo con peso. Respira profundamente por nariz por 30 segundos.
Haz lo mismo con el otro lado.
Relajación de espalda:
Comienza entrecruzando tus manos y lleva tus palmas atrás de la cabeza (entre la nuca y el cráneo).
Empieza a presionar suavemente hacia abajo sintiendo como elonga la musculatura del cuello y de la espalda.
Mantén la postura por 30 segundos.
Activación de temporales:
Con hombros bajos, eleva codos y forma puños.
Lleva tus nudillos a las sienes y comienza a hacer círculos pesados sobre los músculos temporales.
Activación superior:
Para realizarlo, baja los hombros y coloca los extremos de las palmas de las manos sobre las sienes.
Abraza la cabeza con los dedos.
Presiona los músculos temporales primero con las palmas de las manos y luego presiona diagonalmente hacia atrás y hacia arriba
Cierra los ojos intensamente para crear y sentir la resistencia opuesta.
Mantén la postura por 30 segundos.
Intenta realizar esta rutina a diario, son solo 5 minutos, junto con tu skincare. Notarás que a expresión de tu rostro y piel rejuvenecerá, al tiempo que las pequeñas arruguitas que se hacen por la gesticulación de la cara irán desapareciendo.
