¿Quieres oler rico 24/7? Aquí te damos algunos tips que puedes usar

Una de las cosas que a todos nos gusta es oler rico todo el día. Siempre estamos viendo qué ponernos tanto en la ropa, en el cuerpo, incluso hasta en el cabello.

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Sin embargo, comprarnos muchos productos, así sean de los más caro, no siempre garantiza un buen olor en nuestro cuerpo; no solo tenemos que cuidarlo por fuera, sino también por dentro.

Es decir, la alimentación es un factor que influye bastante en el pH de las personas, por ejemplo, no tomar agua, comer mucha comida chatarra y no tener buenos hábitos de higiene, influyen en el olor que nuestras glándulas expiran.

Por eso, aquí te damos algunos trucos que puedes implementar para que puedas mantener un olor fresco, que dure todo el día y sobre todo que se vea reflejada en tu salud.

¿Cómo oler rico?

Toma agua y aliméntate sanamente

Tener hábitos de alimentación saludable, marcarán la diferencia en el olor y pH del cuerpo. Si comemos mal, las bacterias que habitan en nuestro cuerpo entrarán en contacto con las sustancias de la comida y pueden ocasionarnos mal olor.

Toma una ducha

Aunque para muchos de nosotros suene algo lógico, para muchas otras personas no lo es tanto, sin embargo, haciendo esto podrás mejorar tu olor corporal.

Utiliza crema hidratante

Es bien sabido que si hidratas muy bien tu piel, las fragancias y perfumes que utilices después se impregnarán mejor en tu cuerpo.

Y como tip extra, si tu crema viene en conjunto con tu loción para después de la ducha y tu perfume, utiliza los tres, uno después del otro, para sellar todavía mejor y oler aún más rico.

Utiliza loción corporal

Después de haber aplicado tu crema (ya sea neutra o con aroma) utiliza loción corporal o mist para que el olor se impregne todo el día, tanto en tu piel como en tu ropa.

Perfuma tu pelo

Ya sea que apliques alguna crema para peinar o loción, utiliza de preferencia de la misma línea que tu shampoo y acondicionador, o por lo menos utiliza uno que combine con el olor de tus productos diarios.

Ponte perfume

Como uno de los últimos pasos, pero no menos importante, utiliza tu perfume y aplícalo en la zonas de pulso de tu cuerpo, por ejemplo, la nuca, detrás de las orejas, parte interna de codos y las muñecas; recuerda no frotarlo.

Por último, aunado a lo anterior lava tus dientes, pon algún aromatizante en el clóset o en el lugar donde guardes la ropa y evita los alimentos que puedes alterar tu olor de manera desagradable.