¿Alguna vez se te ha ocurrido la grandiosa idea de estornudar con los ojos abiertos? Seguramente en tus más de 100 intentos no lograste ni una ocasión el cometido, ¿a qué se debe? Ahora te decimos por qué todos cierran los ojos al estornudar y qué es lo que lo provoca.
El cuerpo es sabio, tan sabio que en ciertos escenarios es capaz de generar ciertas reacciones con tal de protegerse; eso es precisamente lo que pasa con los estornudos. Pero para entender este fenómeno primero hay que ir a lo más básico... ¿qué es un estornudo?
De acuerdo con MedLine Plus, sitio especializado en salud, "es una explosión de aire súbita, forzada e involuntaria a través de la nariz y la boca". Su causas están relacionadas con la irritación de las membranas mucosas de la garganta o nariz; puede ser causado por rinitis alérgica, abstinencia de drogas, resfriado común o inhalación de corticoesteroides.
Y entonces... ¿por qué al estornudar los párpados se cierran de forma inmediata? Ahora te contaremos qué se esconde detrás de este escenario que te va a dejar muy sorprendido.
Si bien puedes pensar que solo en la zona de la cabeza se activan los músculos, también los músculos del pecho, el abdomen, los hombros y los ojos están ligados directamente al estornudo.
¿Por qué todos cierran los ojos al estornudar?
El motivo de este gesto casi inmediato se debe a que el párpado se cierra para proteger, se trata de una acción reflejo. Pero... ¿dañarse cómo?
La capa de piel que cubre el globo ocular lo hace para evitar daños en los capilares, pero no solo eso... también hay una posibilidad de que si estornudaras con los ojos abiertos estos se podrían salir de sus órbitas. El motivo es que el aire que se expulsa va hasta unos 160 km/h, razón por la que si no se cerraran los párpados podrían existir problemas visuales.
Además de ello, la capa protectora también lo hace para que los ojos no se infecten con los gérmenes y partículas que salen proyectados de la boca y la nariz.
Ahora que ya sabes por qué todos cierran los ojos al estornudar seguramente te ha quedado más claro cómo funciona el cuerpo humano y cuántos mecanismos tiene para cuidar de sí mismo en situaciones que podrían resultar un peligro. ¿Te lo imaginabas?
