Cine de Oro: Así fue el día que Libertad Lamarque humilló a Julio Alemán por un papel

Hay quienes sin importar la fama que poseen o poder que puedan tener en algún trabajo conservan su humildad, empatía y cercanía con los demás trabajadores. Sin embargo, hay quienes limitan dichas virtudes a sus conocidos y con otros muestran una cara totalmente diferente. Esto, dicen, que pasaba con Libertad Lamarque.

Sus grandes amigos gozaban de la parte dulce y amigable de la artista; mientras que los demás eran menospreciados por la actriz, quien incluso en algún momento sabiendo que ella era la estrella de las producciones pedía ser quien diera la última palabra acerca de la contratación de alguien.

Es así que, principalmente los novatos, cruzaban los dedos para pasar el cast de la diva del cine de oro.

Uno de ellos fue ni más ni menos que Julio Alemán quien al convertirse en estrella y ya sin nada que perder reveló la forma en que fue humillado por la actriz argentina.

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Según recuerda el histrión cuando la actriz estaba a punto de participar junto Arturo de Córdova en la película "La cigüeña dijo sí", del director Rafael Baledón, éste le dio la oportunidad de mostrar su talento, pero le dijo que debía acudir con Libertad Lamarque para ver si ella lo aceptaba en el filme.

Entonces, al estar en el departamento de la argentina, él hizo hincapié en que sólo faltaba su visto bueno para comenzar a trabajar en aquel proyecto, escrito por  Edmundo Báez, que tanto lo emocionaba.

Fue ahí cuando la artista le comentó que como interpretaría a su hijo y pasarían mucho tiempo juntos debía sentirse a gusto con él, cosa que él comprendió a la perfección.

Sin embargo, lo que lo hizo sentirse enojado y humillado fue que en lugar de pedirle que actuara frente a ella o platicaran para ver si había química, ella le pidió que acercara su cara hiciera gestos, moviera la cabeza ¡y le enseñara los dientes y muelas!

Con dicho gesto, Julio Alemán se sintió como si fuera un animal, al que le estuviera revisando la edad.

Finalmente, Libertad Lamarque  aceptó que Julio participará en la película, y aunque él se sintió avergonzado por lo que ocurrió y nunca lo olvidó, aceptó con gusto formar parte de ella. Tal decisión fue la correcta, pues dicha película le sirvió como escaparate para impulsar su carrera y obtener papeles en cintas como "Simitrio", "Neutrón, el enmascarado negro", "El Tunco Maclovio", "La muralla verde" y en telenovelas como "Soy tu dueña".