Cine de Oro: El conmovedor gesto de Pedro Infante con unas cocineras

El ídolo de Guamuchil, Pedro Infante, se caracterizó por su nobleza y humildad con sus fans, quienes tienen un sinnúmero de anécdotas sobre él.

Una de ellas es aquella que cuenta que unas jovencitas que trabajaban en la cocina de unas personas muy acaudaladas invitaron a  Infante a probar uno de sus ricos guisos, al finalizar su show.

El cantante amablemente les dijo que le dieran la dirección y que si tenía un tiempo con gusto iría. Aunque todos pensaban que esa respuesta había sido una mera cortesía, no fue así. Él hablaba en serio.

Según cuentan las cocineras, horas después del show, Pedro Infante tocó el timbre de la casa y les mencionó que estaba ansioso de probar lo que habían cocinado.

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Enseguida, las muchachas lo dejaron entrar a la casa y le comentaron que se habían atrevido a hacerle la invitación debido a que sus patrones no estaban. Sin embargo, cuál fue la sorpresa de los tres que en ese momento llegó la familia y los sorprendió.

No obstante, al ver que el invitado en su hogar era ni más ni menos que el actor de "Pepe el Toro", la señora pidió que se preparara una mesa con la vajilla más fina para el histrión.

Al ver aquella movilización y los pedidos que tan urgentes hacían los dueños del hogar, Pedro Infante pidió que no le tomaran a mal, pero él prefería comer sólo el guiso que las niñas habían hecho. Además, explicó que como ellas eran quienes lo habían invitado comería a su lado en el comedor.

Tras esas palabras, la familia hizo que todos los platos se movieran hacia la cocina y que tanto ellas como la familia convivieran en el mismo lugar.

Dicho gesto hizo el día de las cocineras quienes hicieron eco de la humildad del actor y aseguraron que jamás olvidarían aquel día al lado de su ídolo.

¿Que le gustaba comer a Pedro Infante?

El ídolo de Guamuchil tenía fama de ser muy glotón. Su platillo favorito era el panucho, uno de los antojitos más comúnes de Mérida, sitio en el que el ídolo de Guamuchil vivió durante un tiempo.

Sin embargo, cuando se encontraba en el DF, prefería probar la comida casera. Aunque si tenía que comer fuera le gustaba hacerlo en La Florecita, un restaurante ubicado frente a la XEW, en el DF.

"Pedro Infante era muy comelón; sin embargo, fue un hombre que esculpió su cuerpo. Él descubrió a los 27 años que era diabético y supo que se tenía que cuidar y mejorar sus hábitos. Él trató de ser sano, de no beber, de hacer mucho ejercicio y comer sólo comida sana", señala su hija Lupita Infante.