Si bien estos tenis pueden brindar beneficios en ciertos casos, no son adecuados para todos los corredores y podrían generar disfunciones que podrían evitarse con otro tipo de calzado deportivo.
El énfasis en la comodidad y el rendimiento no debería obviar la necesidad primordial de encontrar tenis que se adapten a las necesidades específicas de cada corredor. Conocer tus pies, el ritmo al que corres y las superficies en las que te desenvuelves es crucial para seleccionar el calzado adecuado.
Es muy importante realizar una transición adecuada para que la adaptación al calzado con placa de carbono sea progresiva
Estas zapatillas generan cierta inestabilidad, por tanto, si el cuerpo no es capaz de contrarrestarla puede desembocar en sobrecargas y lesiones.
El correr habitualmente con estos modelos modificará la biomecánica, estas zapatillas exigen gran demanda de la cadena muscular posterior (fascia, tendón de Aquiles, etc.).
Este tipo de zapatillas provocan una vibración en las piernas de los corredores y que esta se ve aumentada cuando el entrenamiento es en cinta de correr, lo que en ocasiones genera molestias en la cintilla iliotibial.
La fascinación por las innovaciones tecnológicas no debe eclipsar la importancia de la salud podológica. El auge de los tenis de fibra de carbono ha llevado a muchos corredores a adoptarlos sin considerar aspectos fundamentales como la biomecánica individual.
