4 pasos claves para (¡por fin!) comenzar a entrenar
Si estas buscando ponerte en forma, sigue los siguientes pasos.¿Quieres comenzar a entrenar y no sabes cómo? Antes de empezar con un entrenamiento físico, es ideal que te propongas realizar estos 4 pasos. Con estas 4 claves podrás lograr mantener tu entrenamiento y lograr cumplir con tus deseos de un cuerpo tonificado, flexible y en forma.
El proceso de comenzar un régimen de entrenamiento efectivo y seguro comienza con una evaluación precisa de tu condición física y este es el primer paso. Antes de someterte a pruebas formales, tómate un tiempo para reflexionar sobre tu nivel de actividad actual, tu salud general y tus objetivos.
¿Has estado haciendo ejercicio regularmente? ¿Tienes alguna lesión o condición médica que debas tener en cuenta? Luego consulta con un profesional de la salud, para verifica condiciones médicas preexistentes, es importante hablar con tu médico antes de comenzar un nuevo programa de ejercicios.
Para obtener una imagen más precisa de tu estado físico actual, puedes considerar realizar las siguientes pruebas:
- Prueba de flexibilidad: Mide la amplitud de movimiento en tus articulaciones y músculos. Ejemplos incluyen el estiramiento de los músculos isquiotibiales o la prueba de la inclinación hacia adelante.
- Prueba de resistencia: Evalúa la resistencia cardiovascular y pulmonar. Puedes hacerlo caminando, corriendo o realizando una prueba de resistencia específica.
- Prueba de fuerza: Mide tu fuerza muscular. Puedes usar ejercicios como flexiones, abdominales o levantamiento de pesas.
- Medición de la composición corporal: Puedes medir tu grasa corporal y masa muscular para obtener una idea de tu composición corporal actual.
El segundo paso es pensar ¿Qué quieres lograr con tu programa de entrenamiento, pérdida de peso, ganancia de fuerza, mejora de la salud cardiovascular?
Una vez que tengas una idea clara de tu condición física actual, puedes establecer metas realistas y específicas. Por ejemplo, podrías fijar un objetivo de perder cierta cantidad de peso, correr una determinada distancia o levantar un peso específico en un período de tiempo determinado.
Con tus metas en mente, puedes avanzar al tercer paso que es crear un plan de entrenamiento que incluya ejercicios, duración y frecuencia. Asegúrate de que tu plan sea gradual y sostenible para evitar lesiones y el agotamiento.
Aquí hay algunos elementos clave que debe incluir tu plan de entrenamiento:
- Frecuencia: ¿Cuántas veces a la semana vas a entrenar?
- Intensidad: ¿Qué tan duro vas a entrenar?
- Tiempo: ¿Cuánto tiempo vas a dedicar a cada sesión de entrenamiento?
- Tipo: ¿Qué tipo de ejercicios vas a hacer?
El último paso a seguir para poder mantener tu programa de entrenamiento y ver los resultados es de seguimiento y ajuste. A medida que avanzas en tu programa de entrenamiento, realiza un seguimiento de tu progreso y ajusta tu plan según sea necesario.
Las metas pueden cambiar con el tiempo, y es importante adaptar tu entrenamiento en consecuencia. Recuerda que la consistencia y la paciencia son clave en cualquier programa de entrenamiento. También es esencial escuchar a tu cuerpo y descansar cuando sea necesario para evitar lesiones.
Considera la orientación de un entrenador personal o un profesional del fitness también puede ser beneficioso, especialmente si eres nuevo en el ejercicio o tienes metas específicas que deseas alcanzar.
Antes y después de cada sesión de entrenamiento, es esencial que realices un calentamiento y un enfriamiento adecuados. Esto puede ayudar a prevenir lesiones y mejorar tu rendimiento. Tampoco olvides programar días de descanso en tu plan de entrenamiento. El descanso es cuando tu cuerpo tiene la oportunidad de recuperarse y fortalecerse.
Una vez llegado este momento mantener la motivación es crucial por lo que ten presente tener metas a corto y largo plazo, de manera que a medidas que vayas cumpliendo tus primeros objetivos te sientas con ganas de ir por más.
También puedes buscar un compañero o compañera de entrenamiento, esto te obligará a no faltar a tus sesiones de ejercicios. Y sobre todo ten paciencia, los resultados no se ven de la noche a a mañana, para lograr el físico que quieres debes ser constante y persistente en la actividad.