Tercer ojo: ¿Qué es, para qué sirve y qué pasa cuando se abre?

Seguramente has escuchado hablar del tercer ojo, el cual es relacionado con visiones religiosas, la clarividencia y la percepción extrasensorial, lo cual supuestamente también se puede lograr a través de la Ouija.

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Se dice que el tercer ojo rige la comunicación espiritual, la conciencia y la percepción, lo cual permite ver más allá de la realidad física.

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Según el hinduismo, todos tenemos un tercer ojo y es el centro nervioso más importante del cuerpo. Está ubicado en la frente, exactamente entre las cejas. También se le llama “sexto sentido”, y tiene una conexión con las imágenes que están siempre presentes en la mente. Es el ojo de la sabiduría, el ojo que todo lo ve.

De acuerdo con la página Anahana, especialista en yoga y meditación, el chakra del tercer ojo está vinculado a la glándula pituitaria, responsable de regular la serotonina.

"Es un chakra altamente espiritual, que se relaciona con las habilidades psíquicas de la persona", resalta. 

Este ojo interior puede profundizar su conexión espiritual cuando está abierto, proporcionando a las personas sabiduría, conocimiento y perspicacia. Los budistas consideran el chakra del tercer ojo como el "ojo de la conciencia".

¿Para qué sirve el tercer ojo?

Los expertos señalan que un chakra del tercer ojo equilibrado proporciona a las personas un "sexto sentido" o una "fuerte intuición". Dichos "poderes" pueden apoyar las experiencias en el mundo real," al permitir que las personas confíen en su propio instinto y en su voz interior", dice el portal antes citado, lo cual ayuda a las personas a experimentar el mundo físico que les rodea con sabiduría y la luz interior.

El tercer ojo se abre por medio de la meditación, oración, algunas posturas de yoga y frases como "estoy abierto a las verdades del universo", "yo soy la fuente de mi verdad", "estoy conectado con el mundo espiritual" y "veo claramente el propósito de mi vida".

Sin embargo, también se puede bloquear, lo cual puede tener un impacto negativo en la salud tanto del cuerpo físico y el estado mental.

En lo físico, el bloqueo del tercer ojo podría causar dolores de cabeza, problemas de visión, trastornos neurológicos, problemas oculares y trastornos cerebrales. Mientras que en lo mental podría producir creencias autolimitantes, falta de propósito, depresión, ansiedad y trastornos del estado de ánimo.