¿Sabías que la lotería no es mexicana? Este es el verdadero origen del popular juego de mesa
La lotería, que consta de 54 cartas, ni siquiera nació en el continente Americano¿Nos mintieron? El tradicional juego de la lotería, que han jugado millones de familias mexicanas, no nació en México, ni siquiera en el continente Americano, como ocurre con algunos platillos que creíamos mexicanos y no lo son.
El origen del popular juego se remonta a Italia, donde fue creada aproximadamente en el año 1400, época en la que se le llamaba Iotto.
De Italia, la lotería se extendió a España y llegó en el siglo XVII a la entonces Nueva España, donde era jugada exclusivamente por las clases alta.
Fue durante la Guerra de Independencia que se convirtió en un pasatiempo entre los soldados, ya que les ayudaba a sobrellevar los malos momentos que vivían en batalla. De acuerdo con la revista Literaturas Populares, los uniformados llevaron a sus hogares el juego y así se extendió por todo México.
Las 54 imágenes que hoy conforman la lotería fueron creadas por el empresario francés Clemente Jacques, quien en 1887 imprimió su propio juego.
¿Cómo se canta la lotería?
El señor Samuel Juárez Marínes, originario de Cárdenas San Luis Potosí, reveló a México Desconocido cómo se canta la lotería, lo cual aprendió gracias que los domingos acudía al centro de Ciudad Madero a jugarla.
- El gallo
El que le cantó a san Pedro
no le volverá a cantar.
- El diablo
El diablo son las mujeres
cuando se quieren casar.
- La dama
La chula de Severiana
un tacón quería empeñar.
- El catrín
Don Ferruco en la Alameda
su bastón quería empeñar.
- El paraguas
El paraguas quitasol.
- La sirena
Medio cuerpo de sirena,
medio cuerpo de mujer.
- La escalera
La escalera, siete palos,
la escalera del pintor.
- La botella
La botella del tequila,
la botella del mezcal.
- El barril
El barril es quintaleño,
el barril del mezcal.
- El árbol
El árbol de la esperanza
que de venir no se cansa.
- El melón
El melón y sus olores,
un pedazo me has de dar.
- El valiente
’Tate quieto, Valentín,
no te vayas a pelear.
- El gorrito
El gorrito ponle al nene,
no se te vaya a resfriar.
- La muerte
La muerte siriquiflaca,
montada en su burra flaca.
- La pera
Me esperas donde quedamos,
para poder platicar.
- La bandera
Bonito cinco de mayo,
el pabellón nacional.
- El bandolón
El bandolón ya no suena,
hay que llevarlo a afinar.
- El violoncello
El violoncello del maistro,
que no deja de sonar.
- La garza
Llegaron los picos largos
de la feria de San Juan.
- El pájaro
El pájaro churlumirlo,
que no deja de cantar.
- La mano
La mano del escribano,
la mano del criminal.
- La bota
La bota rechina,
la bota del general.
- La luna
La luna tuerta de un ojo,
que no deja de brillar.
- El cotorro
Perico, da’cá la pata
y empiézame a platicar
los trabajos que pasabas
cuando no sabías hablar.
- El borracho
Al borracho, mi compañero,
ya se lo van a cargar.
- El negrito
Para negros, en La Habana;
uno acaba de llegar.
- El corazón
El corazón de una ingrata
yo lo voy a traspasar.
- La sandía
La sandía y su rebanada,
un pedazo me has de dar.
- El tambor
No te arrugues, cuero viejo,
que te quiero pa’ tambor.
- El camarón
Camarón que se duerme
se lo lleva la corriente.
- Las jaras
Las jaras o no las jaras,
o las dejas de jalar.
- El músico
El músico, trompa de hule.
La araña
La araña teje su tela.
- El soldado
Centinela, ponte alerta,
que te habla tu general
- La estrella
La estrella polar del norte,
que no deja de brillar.
- El cazo
El caso que te hago es poco;
el caso es averiguar.
- El mundo
El mundo es una bola,
y nosotros, un bolón.
- El apache
Para apaches, en Chihuahua;
uno acaba de llegar.
- El nopal
El auxilio de San Luis,
que le llaman el nopal.
- El alacrán
¡No levantes esa piedra,
que te pica ese animal!
- La rosa
Rosa, Rosita, Rosaura,
Rosita se ha de llamar.
- La calavera
Ya te vide an ca’ la güera.
- La campana
La campana, y tú, debajo.
- El cantarito
Todo cabe en un jarrito,
sabiéndolo acomodar.
- El venado
Don Venancio, a la carrera,
un balazo le han de dar.
- El sol
Solito me estoy quedando,
solito me he de quedar.
- La corona
Si te mueres, te la pongo,
la coronita imperial.
- La chalupa
Rema y rema, Joaquinita,
y no dejes de remar.
- El pino
Te empino y me voy de paso,
y empinado has de quedar.
- El pescado
Me pescaron vacilando
en la puerta del zaguán.
- La palma
Sube a la palma, palmero,
y bájame un cocotal.
- La maceta
En la maceta me dieron,
por no saber barajar.
- El arpa
El arpa vieja de mi suegra.
- La rana
¡Qué saltos pega tu hermana
en la puerta del zaguán!
¿Podrás aprenderte todos los versos para cantar la lotería la próxima vez que juegues con tu familia?