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Reina Isabel II: ¿Cuál es la supuesta maldición de los reyes que llevan el nombre de Carlos?

Se rumoraba que Carlos III elegiría un nombre distinto.

Es el nuevo rey de Inglaterra tras la muerte de la Reina Isabel II.
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Luego de la muerte de la Reina Isabel II, su hijo, el príncipe de Gales pasó de manera inmediata a ser el Rey de Inglaterra, a pesar de que el nombramiento oficial tardará un tiempo en realizarse.

Debido a que es el siguiente en la línea de sucesión al trono británico, Carlos tomará el cargo de rey a sus 74 años y una de sus primeras decisiones fue el del nombre bajo el que deberá reinar hasta su muerte.

A pesar de que se habló de que podría elegir el de 'Felipe I', en honor a su padre, o el de 'Jorge VII', en honor a su abuelo, finalmente decidió que conservaría su nombre por lo que pasará a ser Carlos III.

"Hoy la Corona pasa, como lo ha hecho durante más de mil años, a nuestro nuevo monarca, nuestro nuevo jefe de Estado, Su Majestad el Rey Carlos III", dijo la primera ministra en una declaración al paí ante la residencia oficial de Downing Street.

Carlos, nació en Londres en noviembre de 1948 bajo el nombre secular de Carlos Felipe Arturo Jorge, y acudió con apenas tres años a la coronación de su madre, convirtiéndose en duque de Cornualles, título que la corona británica concede a los herederos al trono.

Por lo que bien podía elegir el nombre de Felipe, Arturo o Jorge para reinar, y esto, debido a que durante años se habló de que Carlos podría ser un nombre de mal agüero en la tradición británica, ya que: Carlos I fue ejecutado, mientras que Carlos II se convirtió en secreto al catolicismo.

¿Por qué se dice que el nombre de Carlos guarda una maldición en la familia real?

Según algunos expertos de la realeza, el hijo mayor de la Reina Isabel II pensó en elegir otro nombre para reinar, pues otros reyes que se llamaban Carlos, tuvieron problemas durante sus reinados.

IG: @theroyalfamily

Carlos I se convirtió en rey de Inglaterra, Escocia e Irlanda, desde el 27 de marzo de 1625 hasta su ejecución en 1645. El reinado de Carlos I fue considerado como tumultoso debido a la lucha de poderes que sostuvo con el Parlamento. Carlos era un abogado del derecho divino de los reyes a gobernar, de buena presencia, que impresionaba como un verdadero caballero.

Hablaba con propiedad, gustaba de la música y la pintura; sin embargo, era considerado un hombre pedante, desconfiado y mentiroso. Muchos temían que intentara tener el poder absoluto.

Los últimos años del reinado de Carlos I estuvieron marcados por la Guerra Civil Inglesa, se vio enfrentado a las fuerzas del Parlamento y a los puritanos. La guerra terminó con la derrota de Carlos que fue enjuiciado, condenado y ejecutado bajo el cargo de alta traición.

Carlos I fue decapitado el 30 de enero de 1649. Era común que el verdugo levantara la cabeza del ajusticiado y la mostrara con las palabras "¡Miren la cabeza de un traidor!", aunque la cabeza de Carlos fue exhibida, no se usaron esas palabras.

Mientras que Carlos II fue rey de Inglaterra, Escocia e Irlanda desde el 29 de mayo de 1660 hasta su muerte en 1685. Su padre, Carlos I, fue ejecutado en 1649 tras la Guerra Civil Inglesa; la monarquía fue abolida y el país se convirtió en una república bajo la tiranía de Oliver Cromwell. En 1660, dos años después de la muerte de Cromwell, se restauró la monarquía con Carlos, quien vivía en el exilio.

A diferencia de su padre, Carlos II fue hábil en su relación con el Parlamento. Se dio a conocer por sus numerosos hijos ilegítimos, de los que sólo reconoció a 14. Fue conocido como el 'Alegre Monarca'. Favoreció las artes y las ciencias y fue menos restrictivo que sus predecesores al mandar a abrir de nuevo los teatros.

La polémica vino cuando abrazó el catolicismo en su lecho de muerte, convirtiéndose en el primer católico que reinaba en Inglaterra desde la muerte de María I en 1558. Ahora el tercer Carlos llegará al trono.