En el mismo se puede observar al portugués con la tradicional vestimenta saudita y, además, empuñando una espada. Las imágenes muestras la gran integración de Ronaldo en la cultura de Arabia Saudita, donde llegó hace menos de un año.
Lejos de alarmarse por los dichos, el príncipe de Arabia Saudita admitió que no le importa lo que digan.
El hombre admitió que le da igual el término “lavado de imagen” con el que apuntan contra sus inversiones en el mundo deportivo.
Lo importante, según confirmó, es que esto le haga ganar aún más dinero.
El gigante árabe realizó una oferta insuperable por el cinco veces ganador del Balón de Oro y Ronaldo firmó hasta junio del 2025, percibiendo un salario anual cercano a los 200 millones de euros, con acuerdos comerciales incluidos.