(VIDEO) Escalofriante de un bebé caminando por la orilla de una ventana a 21 pisos de altura

De niño uno no entiende muchas cosas. Nuestra capacidad para saber qué es algo peligrosos dista mucho de lo que piensa un infante. Solo si nos pagaran, podríamos pensar en caminar en la orilla de una ventaja a 21 pisos de altura. Sin embargo, para este bebé no fue tan escalofriante y lo hizo. Aquí te dejamos las imágenes grabadas en Chile.

Este bebé, a menos que fuera un superdotado, podría saber del riesgo que es caminar a 21 pisos de altura. Seguro que en ese momento llevaba a cabo alguna aventura en su imaginación y se le hizo fácil cruzar la ventana. Nunca titubeó, ni se le vio asustado. Alguien sin esos nervios de acero pudo no haberla contado.

Pixabay | Hay conjuntos especiales para bebés.

Así caminó este niño por la orilla de la ventana a 21 pisos de altura

Desde otra ventana del edificio, una mujer le pide a otra persona que por favor comience a grabar aquella insólita estampa. El niño, de playera blanca y pantalón café cruzó la ventana e incluso llegó a tener los dos pies al borde del abismo. Quien veía todo desde lejos incluso se preguntó dónde estaba la niñera.

Aunque no fueron a salvarlo, ambas personas le gritaron al niño que se metiera y en ese momento, salió una mano que lo jaló hacia tierra firme. Según la información, este sitio no era una casa, sino una guardería informal que claramente no cuenta con el personal especializado para cuidar este tipo de acciones.

Felipe Muñoz, alcalde de Estación Central de Chile, donde este evento sucedió, narró que el edificio tiene una malla transparente que evita que los niños caigan. Abundó en qué no es una situación aislada y tristemente, no cuentan con las herramientas como municipio para entrar a estos departamentos, aunque tienen varias denuncias de lugares similares.

De acuerdo con algunas tarifas, los precios por cuidar a los pequeños y pequeñas es bastante bajo en aquellos sitios de tierras sudamericanas, por lo que las familias optarían en mejor dar estás cantidades a pesar de que no hay la seguridad necesaria.

Sin duda fue escalofriante ver a este bebé caminando por la orilla de una ventana a 21 pisos de altura. Seguramente su familia no lo volverá a llevar a este lugar y no tendrían más que razón.

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