Es que, luego del accidente sufrido en la FP1, las cámaras enfocaron a un niño que lloraba sin consuelo por ver a su ídolo golpearse contra los neumáticos. Y, al ver las imágenes, el equipo lo buscó y lo invitó al box de Red Bull.
Lo que no imaginó fue que mientras miraba atentamente qué pasaba y cómo trabajaban en los autos, aparecería Checo para saludarlo, hablarle y chocar sus manos. El video del momento fue compartido por la categoría y en minutos tomó viralidad. El pequeño, después, realizó un recorrido completo donde pudo tener un volante en sus manos, le mostraron el casco de Checo y hasta se animó a tomar un neumático con sus brazos. Hermoso gesto.
Charles Leclerc (Ferrari) fue el más rápido este viernes en los entrenamientos libres, que no aclararon demasiadas cosas en el Hungaroring. Se rodó muy poco por las cambiantes condiciones climáticas ya que se giró en mojado por la mañana; y en seco por la tarde. Mañana, seguramente, habrá nuevas referencias.