A lo largo de sus 58 años de historia, este emblemático recinto ha albergado eventos de talla mundial y se ha convertido en el orgullo del futbol mexicano.
A principios de la década de los 60′s, el creciente fervor por el América y su gran afición impulsaron la necesidad de construir un estadio propio para albergar a sus seguidores.
Fue así como el proyecto del arquitecto Pedro Ramírez Vázquez fue aprobado y dio inicio a la construcción de lo que sería uno de los símbolos más icónicos de la arquitectura mexicana a nivel global.
Centenares de trabajadores se dieron a la tarea de erigir este imponente “Coloso de Santa Úrsula”, ganando terreno al terreno volcánico hasta concluir la obra.
Inauguración e historia
El 29 de mayo de 1966, el Estadio Azteca abrió sus puertas con un partido inaugural entre el América y el Torino de Italia, marcando el inicio de una era dorada para el futbol mexicano.
A lo largo de sus casi seis décadas de existencia, el Estadio Azteca ha albergado eventos deportivos de talla mundial.
Ha sido sede de dos Mundiales de la FIFA (1970 y 1986), un Mundial Femenil (1971), un Mundial Juvenil (1983), los Juegos Olímpicos de 1968, la Copa Confederaciones de 1999 y numerosos partidos de eliminatorias mundialistas y olímpicas.
Pero el Azteca no solo ha sido testigo del deporte, también ha sido escenario de eventos musicales de primer nivel internacional, visitas papales y programas altruistas que han dejado huella en la historia de México.
El Estadio Azteca es el hogar del Club América, el equipo más laureado del futbol mexicano.
En este recinto, el América ha conquistado ocho de sus diez títulos de Liga, un torneo de Copa, cinco torneos de CONCACAF, dos Copas Interamericanas y ha sido sede de seis ediciones de la Copa Libertadores de América.
A pesar de los avances tecnológicos y la modernización de los estadios a nivel mundial, el Estadio Azteca ha sabido mantener su esencia clásica y conservar sus orígenes, que lo convierten en un templo del futbol mundial, a pesar que en 2026 cambiará de nombre.
Su rica historia y su imponente presencia lo convierten en un ícono de la arquitectura y el deporte mexicano, distinguiéndolo de cualquier otro recinto. Hoy, cuando el Estadio Azteca cumple 58 años de historia, podemos afirmar con orgullo que es el mejor estadio de México
Periodista deportivo con más de 10 años de experiencia. Fui conductor de radio y redactor. Actualmente, colaboro en Mendoza Post y soy corresponsal de ESPN en Mendoza, Argentina. Me gradué como Licenciado en Comunicación Social, de la Universidad Nacional de Cuyo. Soy un apasionado por los deportes, el futbol, particularmente.
