Albeiro Usuriaga, más conocido como el Palomo, fue un futbolista colombiano. Jugó de delantero y su mayor trascendencia deportiva la logró en el Independiente de Avellaneda de Argentina. Fue parte de la gran generación de futbolistas colombianos de los años 90, entre los que se destacaron René Higuita, Carlos Valderrama, Freddy Rincón, Faustino Asprilla, Adolfo Valencia, Leonel Álvarez, entre otros. Durante la temporada 1995/96 defendió los colores de Necaxa y gritó campeón de la Liga de México.
El 11 de febrero de 2004, Usuriaga estaba presente en un negocio de juegos de azar y venta de bebidas, ubicado en la ciudad de Cali. Allí acostumbraba pasar el tiempo con amigos y vecinos jugando dominó o cartas. En ese momento, un joven se bajó de una moto y le disparó varias veces, ocasionando su muerte inmediata
Aunque los informes preliminares de las autoridades señalaron que el crimen de Usuriaga se debió a que el reconocido jugador presenció un asesinato en su barrio de origen, la Fiscalía General de la Nación esclareció el homicidio tres años después. De acuerdo con un informe divulgado por el diario El País, las investigaciones concluyeron que el asesinato fue ordenado por Jefferson Valdez Marín, jefe de una banda de sicarios conocida como "Molina" o "La Negra". Sus funerales en Cali fueron una fiesta: Una multitud irrumpió en la catedral a pura música y lo trasladó al cementerio Metropolitano como ese ídolo que fue.
Albeiro Usuriaga, más conocido como el Palomo, brilló en la década del 90.
El delantero colombiano tuvo su mejor actuación en Independiente de Avellaneda (Argentina).
Fue parte de la gran generación de futbolistas colombianos de los años 90, entre los que se destacaron René Higuita, Carlos Valderrama, Freddy Rincón, Faustino Asprilla, Adolfo Valencia, Leonel Álvarez, entre otros.
En la temporada 1995/96 jugó para Necaxa, donde ganó la Liga de México.
Murió el 11 de febrero de 2004 en Cali.
Se encontraba en un negocio de juegos de azar y venta de bebidas.
Un joven se bajó de una moto y le disparó varias veces, ocasionando su muerte inmediata.
