¿Vicente Fernández fichaba para comer? Esto dice Olga Wornat sobre el Charro de Huentitán
En uno de los capítulos más recientes de la serie de El último rey, el hijo del pueblo narraron la supuesta anécdota23 de marzo, 2022 | 12:32 p.m.Tremenda polémica sigue causando la transmisión de la serie El último rey, el hijo del pueblo, y es que además de la batalla legal que enfrenta Televisa, algunos de los capítulos, muestran duros pasajes de la vida de Vicente Fernández.
Uno de los más polémicos fue el capítulo seis donde se revelan algunos de los secretos que la familia Fernández hubiera querido mantener ocultos al público.
En éste, muestran que después de que Vicente se casara con Doña Cuquita, ambos viajan a Guadalajara, Jalisco, para que él busque oportunidades en el mundo de la música. Tiempo después, el intérprete trabaja en un restaurante pero es despedido debido a que no accede ser amante de la dueña del lugar.
En 1964, la pareja toma la decisión de mudarse a Hermosillo. Al llegar a un puesto de tacos y pedir que le regalen un taco, otro de los clientes se ofrece a invitarle la comida y le promete trabajo.
En una escena, el cantante es cuestionado por la periodista Dalia, si es verdad que fichaba en un cabaret , situación que molesto, éste niega, pero muestra su nerviosismo.
Incluso, la reportera le recuerda cuando en una entrevista asegura que no aceptaría un trasplante por miedo a que sea de una persona gay.
¿Qué dice Olga Wornat sobre aquella época de la vida de Vicente Fernández?
Según el libro de Olga Wornat la pareja se casó en diciembre de 1963, y la misma noche de bodas se fueron de Huentitán a la Ciudad de México, donde él se fogueó como cantante en El Amanecer Tapatío, interpretando hasta 60 canciones diarias sin micrófono.
"Vicente tuvo un enredo con la dueña del Amanecer Tapatío y se vio obligado a renunciar para salvar a su flamante matrimonio... Chente acomodó a su medida la historia de su partida abrupta de la Ciudad de México, y le confesó al público del programa 'Sal y Pimienta' de la cadena Univisión, que 'al principio de mi carrera sufrí tantas humillaciones que, de hecho, hasta me rajé cuando Cuca y yo esperábamos a Vicente. Incluso me regresé a Jalisco, pues se me cerraron las puertas", se puede leer.
Al llegar a Hermosillo, Sonora, el cantante habría ido a pedir trabajo al cabaret 'Lucila', de la zona roja de Hermosillo, Sonora, en donde se puede leer:
"Al segundo día, después de la variedad, me dijo uno de los muchachos: 'Chente, ahí está un señor que quiere invitarte una copa. Tienes que ir a fichar'. '¿Cómo que a fichar? Si no soy prostituta', repliqué. Acepté porque tenía que mantener a mi vieja y a mi hijo. Me pagaban 75 pesos por cantar y la ficha a cinco por copa".
"Al otro día me dijeron que estaba el mismo señor, pero yo ya no quería ir. Entonces me recomendaron pedir coñac con un refresco de cola... Seguí el consejo, fiché como 20 copas y gané más de lo de mi sueldo", se puede leer en el libro El último rey de Olga Wornat, acerca de ese momento de la vida de Vicente Fernández.