Churrería El Moro: Origen de la palabra ‘churro’ y cómo llegaron a México
Su origen viene desde un país asiático y su significado hace referencia a un animal.
No hay gastronomía inigualable a la mexicana, con su gran variedad de sabores, sazones y estilos para complacer el paladar de cualquiera, desde los mejores lugares para comer carnitas hasta mariscos a precios que se ajustan a la cartera de todos. Sin embargo, los postres tampoco se quedan atrás, muchos han degustado un delicioso churro de El Moro, pero pocos sabes su significado e historia.
La más emblemática Churrería El Moro se fundó en 1935 gracias a la llegada de Francisco Iriarte procedente de un pueblo llamado Elizondo en España, quien al ver que en la capital de nuestro país no vendían churros, puso un carrito y comenzó a venderlos en el Zócalo.
Los churros eran una tradición en España, por lo general se vendían afuera de las fábricas de Madrid, la diferencia es que ellos los conocen como “porras” se fríen en grandes espirales, son más gruesos y esponjosos.
Origen de la palabra ‘churro’
La receta ni es española ni mexicana, llegó desde China, pero se decidió hacerle modificaciones como sustituir la sal por azúcar, y se le dio el nombre de “churro” ya que su forma se parecía al conjunto de cuernos de la oveja churra de Castilla y León.
Fue en el siglo XIX cuando se popularizó en la historia mexicana este delicioso postre mexicano que puede consumirse a cualquier hora del día, mientras que en China se le considera la comida callejera más económica y humilde de Shangai.
¿Por qué la Churrería se llama “El Moro”?
Luego de poner su carrito de churros, el español Francisco Iriarte abrió su local en el número 42 de lo que hoy conocemos como Eje Central Lázaro Cárdenas y le puso el nombre de “El Moro” pues así se les dice en España a los que se dedican a hacer churros.
Su local se hizo tan famoso que hasta lo visitaban grandes actores del Cine de Oro como Cantinflas, Tin Tan, Resortes y hasta Octavio Paz. A la muerte de su dueño, La Churrería El Moro ha pasado de generación en generación como un negocio familiar de gran tradición.