Hepatitis: ¿Cuántos tipos hay y qué las hace diferentes?
La hepatitis es una enfermedad que puede provocar más de 1.3 millones de muertes al año, pero si se trata a tiempo, se puede combatir este padecimiento.
La hepatitis es una enfermedad que produce alrededor de 1.4 millones de muertes al año, sus síntomas son variados dependiendo de los tipos y cada una es diferente, por eso te explicaremos con más detalle los males que produce este padecimiento.
¿Qué es la hepatitis?
Primero, la hepatitis es una enfermedad que provoca una inflamación del hígado, un órgano vital que se encarga, entre otras funciones, de filtrar la sangre, producir bilis, procesar nutrientes y descomponer ciertas sustancias para que el cuerpo las aproveche mejor.
Un hígado inflamado o dañado puede causar severas fallas en todo el cuerpo, la hepatitis es provocada por un virus y puede desarrollarse por el alto consumo de alcohol, drogas y fármacos.
Esto provoca una disfunción del sistema inmunológico que hace que este ataque las células hepáticas, pero no todo es tan malo, ya que esta enfermedad tiene cura.
¿Cuántos tipos de hepatitis hay?
Si se trata a tiempo, el paciente puede llevar una vida completamente normal, pero hay casos en los que el problema se agrava y puede provocar la muerte.
Hay cinco tipos diferentes de hepatitis, por lo que puede ser más aguda o grave, dependiendo del tipo y pueden provocar diversos niveles de daño en el cuerpo humano.
Hepatitis A (VHA)
Este tipo de hepatitis se produce por tomar agua o alimentos contaminados. La infección es leve y suele recuperarse el paciente en menos de una semana.
Los síntomas más comunes son fiebre, pérdida de apetito, calambres en el estómago, ictericia, orina oscura y fatiga. Es de alta transmisión, por lo que se pide a todos lavarse bien las manos y mantenerse con una alimentación saludable.
Hepatitis B (VHB)
Se estima que hay más de 250 millones de personas infectadas por Hepatitis B en el mundo, se puede transmitir por la sangre, semen u otros fluidos entran en el cuerpo de una persona sana de una infectada.
En todo el mundo hay casi 260 millones de personas con infección crónica por el virus de la hepatitis B, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se transmite sobre todo cuando la sangre, el semen u otros líquidos corporales de una persona infectada, incluso en cantidades microscópicas, entra en el cuerpo de una persona no infectada.
Este tipo de hepatitis se puede transmitir a través de prácticas sexuales sin protección, compartiendo equipos contaminados como agujas, jeringas e incluso equipos médicos.
Este tipo de virus puede provocar cirrosis y cáncer de hígado, pero si se detecta a tiempo, no habrá ningún problema con el portador del virus. Se recomienda vacunarse contra este tipo de hepatitis.
Hepatitis C (VHC)
Esta es más común en personas que recibieron una transfusión con sangre contaminada, piercings, tatuajes y compartir jeringas. Este tipo no tiene vacuna.
Así también, la hepatitis C recae en la posibilidad de hacerse crónica. A este respecto, la hepatitis B y C que son crónicas afectan a más de 300 millones de personas en todo el mundo.
Hepatitis D (VHD)
Esta enfermedad afecta sólo a personas infectadas por la hepatitis B, ya que necesita el virus para sobrevivir. La simultaneidad de ambos virus hace que pueda aparecer una afección más grave.
Se transmite vía sanguínea, jeringuillas usadas por personas infectadas o por compartir objetos de higiene personal como cepillos de dientes o máquinas de afeitar.
Hepatitis E (VHE)
Se transmite igual que la hepatitis A, a través del consumo de agua o alimentos contaminados, pero no cuenta con una vacuna. Tampoco causa enfermedad crónica.
Sea cual sea el tipo, esta enfermedad puede desarrollar millones de muertes al año, así que lo mejor es prevenir cualquier tipo de hepatitis.