¿Qué pasó con la millonaria mansión donde fue detenido Ovidio en 2019?
Ovidio Guzmán fue detenido en una lujosa residencia en 2019, cuando se dio el famoso Culiazanazo.
Luego de la captura de Ovidio Guzmán por parte del Gobierno Federal, han salido a la luz diversas historias del Hijo del Chapo, pero hay una en especial que llama la atención y es qué pasó con la millonaria mansión que posee.
Así, luego de que las autoridades lograran una segunda captura de Ovidio en Sinaloa, hubo diversos conatos de violencia en el estado. Pero a pesar de eso, el Hijo del mayor narcotraficante mexicano fue enviado a Ciudad de México, donde continuará un proceso en su contra.
¿Quiénes son los padres de Ovidio Guzmán?
Ovidio Guzmán es hijo del narcotraficante Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán y de Doña Griselda López, considerado como uno de los objetivos prioritarios del gobierno federal, debido a que es una de las cabezas y figura del cartel de Sinaloa.
De esta forma, es la segunda ocasión en la que es capturado en el presente sexenio Ovidio. En la primera ocurrida el 17 de octubre de 2019 es mejor conocida como el Culiacanazo, pero se le dejó en libertad por diversos ataques en el estado de Sinaloa, sobre todo a civiles.
¿Cuánto cuesta la lujosa residencia donde fue capturado Ovidio Guzmán en 2019?
En aquella ocasión, Ovidio se encontraba en una residencia con zona de roof garden, así como con garaje cubierto y descubierto y el lujoso inmueble se localiza a un costado de dos lotes baldíos, del Río Humaya y muy cerca del Estadio Banorte, la casa de los Dorados de Sinaloa.
Además, pocas personas se acercan a esta zona, ya que es considerada sin ley y de alto peligro, pero sólo invitados especiales pueden entrar a la residencia.
De acuerdo con una valuación, el precio de estas viviendas rondan los $105,000 (unos 2 millones de pesos) a los $260,000 (más de 5 millones de pesos) dólares dependiendo del tamaño y de los lujos que tenga cada residencia.
Actualmente, la millonaria residencia se encuentra deshabitada, además que es constantemente vigilada por las autoridades y los militares.
Así terminó el primer escondite de Ovidio Guzmán, el cual parece olvidado, pero nadie se atreve a entrar en él, ya que es propiedad del narcotraficante hasta la fecha.