Michael Jordan es sin duda el mejor jugador de básquetbol que ha dado la historia, en más de una ocasión nos hemos asombrado de sus jugadas, sus vuelos, los puntos acumulados, un espectáculo lleno de adrenalina que no podíamos dejar de mirar.
Pero esto podría no haber sucedido nunca y por solo segundos es que la magia de Jordan llegó al mundo. Es que cuando el exbasquetbolista era pequeño sufrió un accidente que le podría haber impedido la carrera que ya todos conocemos.
Michael recuerda esos momentos en una entrevista, que dio hace ya tiempo, tenía tan solo 26 años y en ese entonces jugaba con un contrato de 26 millones con los Bulls, cuando decidió contar un accidente que casi lograr cambiar la historia del básquetbol.
Jordan recuerda en la entrevista que tenía 5 años cuando casi pierde un pulgar y con este la posibilidad de lo que iba a ser su carrera.
Un primer recuerdo muy doloroso de su niñez.
Los hermanos de Jordan trabajaban cultivando tabaco, Michael aun era muy chico para ese empleo.
Al cumplir sus 5 años, su madre lo obligó a conseguir algún trabajo de verano para colaborar en la casa.
El exjugador no iba a hacer lo mismo que sus hermanos.
Se buscó un trabajo de mantenimiento en un hotel
Fue cuando casi pierde su dedo con el corte de un hacha, recuerda Jordan el dolor, el miedo y una vecina que confunde alcohol con querosene y lo rocía.
“Lo dejé en seguida. No era para mí. No podía seguir los horarios con disciplina. Después, no volví a tener otro trabajo”, cuenta el jugador profesional.
Por suerte para Jordan y el mundo, el básquetbol llegó de forma natural a su vida, pegó un estirón tardío que lo llevó a superar el 1,8 metro y eso le abrió las puertas al mundo que conocemos actualmente con un mítico Michael Jordan que aún al recordar sus jugadas nos deslumbra.
