El púgil manifestó que, cuando se ve al espejo y observa las manchas en su cara, éstas le indican que el fin de su vida está muy acerca.
“Todos vamos a morir algún día, por supuesto. Entonces, cuando me miro al espejo, veo esas pequeñas manchas en mi cara y digo ‘¡Wow! Eso indica que mi fecha de vencimiento se acerca’”, dijo.
Por otra parte, Tyson confesó que ha habido ocasiones en las que ha llegado a sentirse solo, a pesar de que la mayor parte de su vida está acompañado, ya que muchas de las personas que lo rodean, están con él por interés.
Mencionó que el dinero no da felicidad ni puede impedir la muerte de nadie. "Siempre digo que el dinero es una falsa sensación de seguridad”, comentó.
“El dinero no significa nada para mí. Quienes piensan que el dinero les puede hacer felices, es que nunca lo han tenido. Crees que no puede pasar nada. Eso no significa que no contraerás una enfermedad o que no te atropellará un coche. ¿Puede el dinero asegurarte cuando saltas de un puente?", agregó.
Mike Tyson nació en el conflictivo barrio de Brownsville, Brooklyn (Estados Unidos), el 30 de junio de 1966, creció rodeado de delincuencia, crímenes y asesinatos. Nunca conoció a su padre biológico y creció yendo de casa en casa desahuciado junto a su madre y hermanos.
A los siete años dejó el colegio por el acoso que sufría fruto de su tartamudez y la especial atención y trato que brindaba a su hermana pequeña, Denise Tyson. Desde ahí fue cuesta abajo y sin frenos. Con 10 años fue detenido por primera vez y poco más de tres después consiguió la primera de sus grandes marcas. Fue puesto bajo custodia policial 38 veces.
| Instagram @miketyson
A raíz de su turbulenta y violenta actitud fue enviado al reformatorio de la Tyron School for Boys y, tras una trifulca con otro interno, fue trasladado nuevamente al centro de Elmwood. Allí se comenzó a cincelar la figura de "Iron Mike".
El exboxeador Bobby Stewart le puso en contacto con la que sería una de las personas más influyentes de la vida de Tyson. El célebre entrenador Cus D’Amato lo puso bajo su tutela y se convirtió en el timón de un barco de guerra a la deriva completamente repleto de inseguridades, complejos y una total carencia de autoestima y madurez.
| Instagram @miketyson
El técnico estadounidense lo acogió y disciplinó enderezando el rumbo de un delincuente que probablemente acabaría muerto en cualquier riña absurda.
Tras años de entrenamiento, lucha y sacrificio llegó a la élite del boxeo mundial. Con 20 años, 4 meses y 22 días, el boxeador Mike Tyson venció a Trevor Berbick en una contienda para la historia.
