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Aaron Rodgers deja en suspenso su futuro: ¿Se despide de la NFL en 2025?

El futuro de Aaron Rodgers no está escrito, pero lo que es seguro es que su decisión tendrá un impacto significativo en la NFL.
Su contrato de con los Jets está firmado hasta 2025. (Instagram / @aaronrodgers12)
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Aaron Rodgers, una de las figuras más icónicas de la NFL, se encuentra en un momento crucial de su carrera. Con 41 años recién cumplidos, el futuro del quarterback en la liga está lleno de incertidumbre. Aunque dejó entrever que podría regresar en 2025, su decisión depende de varios factores: su estado físico, la dirección del equipo y, sobre todo, su deseo personal de continuar en los emparrillados.

En este sentido, Rodgers fue claro al afirmar que, si decide seguir jugando, quiere hacerlo con los New York Jets. Sin embargo, la situación del equipo, con un récord de 3-8 y grandes cambios en su estructura, podría complicar esta posibilidad. ¿Está llegando el momento de decir adiós a una carrera legendaria?

¿Qué está en juego para Rodgers y los Jets?

El contrato de Rodgers con los Jets está firmado hasta 2025, pero sin dinero garantizado restante, el equipo tiene la libertad de cortar lazos con él. Esto cobra relevancia tras el despido del entrenador Robert Saleh y el gerente general Joe Douglas, un movimiento que marca el inicio de una nueva etapa para la franquicia. Los nuevos líderes podrían decidir apostar por un mariscal de campo joven o confiar en el suplente Tyrod Taylor, dejando a Rodgers en un limbo.

Para Rodgers, la situación no es menos compleja. Después de una temporada plagada de lesiones y estadísticas decepcionantes, 17 pases de touchdown y 7 intercepciones, su posición como titular podría estar en peligro. Aunque negó rumores de querer jugar fuera de los Jets, su compromiso con el equipo está condicionado por su deseo de sentirse valorado y de estar en un entorno competitivo. “Quieres estar en un lugar donde sientas que puedes ganar y que eres valorado”, afirmó recientemente.

¿Qué dice Rodgers sobre su futuro?

A pesar de la tormenta mediática, Rodgers mantiene la calma. En sus propias palabras, está “abierto a todo y no se apega a nada”. Aunque aseguró que su cuerpo se siente bien tras superar varias lesiones, también reconoció que rehabilitarse constantemente ha sido un desafío emocional.

En este punto de su carrera, entiende que el reloj está corriendo. Después de un desastroso paso por los Jets en las últimas dos temporadas, el mariscal de campo enfrenta una decisión trascendental. ¿Valdrá la pena luchar por una última oportunidad o será el momento de colgar los botines?

Sin duda, el futuro de Aaron Rodgers no está escrito, pero lo que es seguro es que su decisión tendrá un impacto significativo en la NFL.