En los Carolina Panthers se respira mucha tensión tras los malos resultados, pues el equipo tiene un récord de 1-5, son uno de los peores en cuanto ofensiva y el pasado lunes despidieron al entrenador en jefe Matt Rhule, por lo que quedó a cargo Steve Wilks.
Durante el juego del pasado domingo ante Los Ángeles Rams, los Panthers volvieron a mostrar que pasa por un mal momento, ya que el receptor abierto, Robbie Anderson, tuvo una fuerte discusión con su entrenador de posición Joe Dailey, por lo que Wilks no dudó en echarlo del partido.
Anderson perdió los estribos y tuvo un un intercambio de gritos con Dailey hacia el final de la primera mitad e inició la segunda mitad en una bicicleta estática utilizando una gorra en lugar de su casco.
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Después Robbie Anderson se sentó en una hielera usando la gorra mientras el resto de la ofensiva discutía la estrategia en la banca. Sin embargo, mientras que su equipo perdía 17-19, el receptor perdió el control.
El receptor no tuvo una sola recepción en el partido del pasado domingo y ha tenido problemas en general. Anderson cuenta 13 recepciones para 206 yardas, 75 de ellas en un touchdown en el primer partido de la temporada regular contra los Cleveland Browns.
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