Luego de su nombramiento como nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Loretta Ortiz destacó cuáles son las controversias más importantes que deberá resolver en conjunto con los otros ministros en su nuevo encargo y aseguró que no aceptará injerencia del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en sus decisiones .
Al respecto, la abogada consideró que una de las principales tareas que tendrá que resolver serán las posibles controversias presentadas por el “decretazo” de AMLO, así como las que se pudieran generar a raíz de la consulta sobre revocación de mandato, o la propuesta de reforma eléctrica.
“Nunca he recibido una llamada del presidente ni de nadie, pero si la recibiera no atendería a este llamado”, afirmó en entrevista con Joaquín López Dóriga en Radio Fórmula.
La ministra consideró que las posibles controversias que pudieran surgir a raíz de lo anterior podrán ser resueltas por la Suprema Corte, al tiempo que aseguró que en todos los casos se conducirá de manera independiente y autónoma. Loretta Ortiz puso como ejemplo el caso del juez Juan Pablo Gómez Fierro, pues ella fue la encargada de evaluar su desempeño cuándo formó parte de la Comisión de Vigilancia en el Consejo de la Judicatura Federal. A pesar de que en múltiples ocasiones la ministra se ha definido como una simpatizante del presidente López Obrador, aseguró que su obligación como juzgadora es dejar de lado esta simpatía para juzgar con autonomía. El nombramiento de Loretta Ortiz como nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación fue aprobado por el Senado el pasado martes y puede considerarse como un hecho histórico, pues gracias a esto, por primera vez habrá cuatro mujeres que integrarán la sala superior, conformada por 11 ministras y ministros.
