Copa América 2019: la vez que Brasil alcanzó las nueve estrellas
La verde-amarela conquistó su noveno título de Copa América, venciendo a Perú 3-1 en una final memorable en el Estadio Maracaná.La selección de futbol de Brasil se coronó campeón de la Copa América por novena vez en su historia, tras vencer a Perú 3-1 en la final celebrada en el Estadio Maracaná de Río de Janeiro.
Este triunfo, con goles de Everton, Gabriel Jesús y Richarlison por los brasileños, marcó un momento significativo no solo en el ámbito deportivo, sino también en el contexto cultural y social del país amazónico, gobernado en aquellos tiempos por el controvertido y ultraderechista, Jair Bolsonaro.
El camino a la victoria
Brasil demostró su supremacía desde el comienzo del torneo, mostrando un futbol ofensivo y de gran calidad técnica. Liderados por el entrenador Tite, el equipo verdeamarela supo combinar juventud y experiencia, con jugadores como Dani Alves, quien fue nombrado el mejor jugador del torneo, y jóvenes talentos como Gabriel Jesús y Richarlison.
El desempeño de la selección brasileña fue una muestra del resurgimiento del futbol brasileño, que venía de momentos difíciles tras la humillante derrota 7-1 ante Alemania en la Copa del Mundo de 2014. Este triunfo en la Copa América no solo significó un título más, sino también la reafirmación del talento del futbol amazónico y de calmar las aguas tras aquella goleada a manos de los teutones.
Una justa continental diferente
México y Estados Unidos declinaron la invitación a participar en la justa debido a sus compromisos con la Copa Oro de la Concacaf. En su lugar, invitaron a países asiáticos: Qatar y Japón, decisión criticada por no ser parte del continente, pero justificada por tener pocas selecciones en el torneo.
El 2019 fue un año de contrastes en Brasil. En el ámbito político, el país estaba bajo la administración del presidente Jair Bolsonaro, cuyo gobierno generaba opiniones polarizadas. Mientras que algunos lo veían como un líder capaz de llevar a cabo las reformas necesarias para el crecimiento económico, otros criticaban sus políticas ambientales y sociales.
En el campo de juego, Brasil jugaba a placer. En la fase de grupos goleó sin piedad a Bolivia 3-0, empató sorpresivamente 0-0 con Venezuela y vapuleó 5-0 a Perú, curiosamente el equipo al que enfrentaría más adelante.
Paraguay, un rival complicado
En los cuartos de final, la selección brasileña desconcertó a todos sus seguidores tras un decepcionante empate sin goles contra Paraguay, lo que obligó a definir la serie en una tanda de penales. Desde el punto de los once metros, Willian Borges, Marquinhos, Phillippe Coutinho y Gabriel Jesús demostraron que el equipo aún tenía mucho que ofrecer, a pesar de la falla de Firmino. Por el lado paraguayo, Gustavo Gómez y Derlis González también erraron sus lanzamientos, lo que finalmente aseguró la victoria para Brasil.
El filósofo brasileño Paulo Freire dijo alguna vez que “la cultura no es simplemente un adorno de la vida humana, es la esencia misma de la existencia”, frase que cobra relevancia al observar cómo, a pesar de los desafíos, Brasil avanzaba a semifinales.
En las semifinales, Brasil se enfrentó a su acérrimo rival, Argentina, a quien derrotaron 2-0 con goles de Gabriel Jesús y Roberto Firmino. La otra semifinal vio un emocionante encuentro entre Chile y Perú. Aunque Brasil había vapuleado a los incas 5-0 en la fase de grupos, Perú se recuperó de manera impresionante, eliminando a Chile con un contundente 3-0. Además, habían superado a Uruguay en los cuartos de final tras una emocionante tanda de penales.
Sin duda, el futbol, a menudo denominado “el deporte más hermoso del mundo”, ocupa un lugar especial en el corazón de los brasileños. No es simplemente un juego, sino una profunda expresión de identidad y comunidad y los aficionados estaban listos para la finalísima ante Perú.
Llegó la novena estrella
La final no siguió el mismo guión que el partido de la primera fase entre los incas y los brasileños. En esta ocasión, la selección peruana mostró una fuerte resistencia y se erigió como un digno rival para el equipo local, incluso poniéndolo en aprietos al empatar al final del primer tiempo, lo que hizo que los aficionados pensaran en un posible maracanazo.
Sin embargo, el desenlace fue diferente: Brasil sentenció el partido 3-1 con goles de Everton, Gabriel Jesús y Richarlison, mientras que por los peruanos marcó Paolo Guerrero. Así la verde amarela aseguraba su noveno título en la historia de la Copa América.
El triunfo de Brasil en la Copa América 2019 puede ser visto a través de la lente del filósofo Friedrich Nietzsche, quien dijo: “Lo que no te mata, te hace más fuerte”. La victoria llegó después de años de altibajos y desafíos, mostrando la capacidad de superación y la fuerza del espíritu colectivo brasileño.