Leo Suárez, el delantero argentino, ha conquistado a la afición universitaria con su talento, garra y espíritu de lucha.
El jugador de Pumas se ha convertido en una pieza fundamental del equipo, liderando el ataque con goles y asistencias que lo han posicionado como una de las figuras de la Liga MX.
Pero detrás de su éxito en la cancha, se esconde una historia de superación personal. Cuando nació, Suárez enfrentó un desafío médico: el pie equinovaro.
También conocido como “pie zambo”, es una deformidad presente desde el nacimiento que afecta la forma y posición del pie.
En el caso del jugador, los tejidos que conectan los músculos al hueso eran más cortos de lo normal, lo que provocaba que su pie estuviera torcido hacia adentro.
Desde pequeño, Leo enfrentó dificultades para caminar. Se sometió a una cirugía que le permitió mejorar la movilidad de su pie.
El delantero de los Pumas es uno de los pocos futbolistas profesionales que han logrado triunfar a pesar del pie equinovaro.
Otros ejemplos notables que lograron superar esta condición son la leyenda inglesa del Liverpool, Steven Gerrard, y al referente de Colo Colo, el chileno Miguel Riffo.
La historia del jugador de Pumas es una prueba de que con esfuerzo, determinación y el apoyo de su familia, todo es posible.
Licenciada en Comunicación Social egresada de la Universidad Juan Agustín Maza. Me desempeñé durante siete años como Coordinadora de Desarrollo Social en la Municipalidad de Las Heras, Mendoza, Argentina. Diplomada en Marketing Digital por la Universidad de Cuyo. Me apasionan los deportes, especialmente el fútbol y el futsal.
