¿Cuánto cuesta un casco de Fórmula 1 y porque no lo regalan los pilotos?
Este elemento debe reunir los mejores estandares de seguridad en la alta competencia18 de abril, 2023 | 05:47 p.m.Si hay algo distintivo en un participante de los deportes mecánicos es el reglamentario casco. Es más, tanto para los corredores de motos como de autos, en cualquier categoría, si hay algo que los puede identificar de inmediato es su casco, ya que todos los personalizan y le dan su sello propio a este insoslayable elemento de seguridad, en especial en la Fórmula 1.
Al igual que Sergio "Checo" Pérez, todos los pilotos hacen una verdadera ceremonia cada temporada, presentando su nuevo casco, en el que se distinguen sus toques personales y los sponsors que lo acompañarán. A diferencia de estos tiempos, los cascos de los corredores antes eran su marca identificatoria, y no cambiaba casi a lo largo de trayectoria.
Y hablando de motos y autos, hay un factor que asombra, y pese a lo que se piensa en el común de la gente, el casco de Fórmula 1 es infinitamente más duro que uno de MotoGP. La lógica radica en que, si bien en la motocicleta se está más expuesto, en un auto de alta performance, que viaja a más velocidad y con fuerzas mayores que soportar, el casco debe soportar más castigo en caso de accidentes.
Esto también se nota en el costo de un casco y otro, donde el de Fórmula 1 llega a valer casi 15.000 euros, algo así como 300.000 pesos mexicanos. Este factor explica el porqué, pese a que sea el más alocado de los festejos, nada justifica que un piloto de F1 regale o tire su casco al público, sea cual sea el logro obtenido por el deportista.
Ensayos de tortura para los cascos
En el año 2004 la marca Schuberth realizó el más exigente ensayo de tortura para un casco de F1. Hizo que un tanque de guerra de 55 toneladas pasara por encima del casco del séxtuple campeón mundial Michael Schumacher, de quien se desconoce su verdadero estado de salud luego de su accidente del 2013, cuando esquiaba. El resultado fue que el casco quedó prácticamente intacto, apenas con algún rasguño, a pesar que se trató de una tecnología de hace casi dos décadas.
Un casco es una verdadera pieza de ingeniería y en constante evolución. Tiene 18 capas de fibra de carbono además de fibra de vidrio, kevlar, aluminio y titanio para una pieza de menos de un kilo que resiste hasta impactos de bala. Desde el accidente del brasileño Felipe Massa en el Gran Premio de Hungría 2009 se evidenció un punto débil de los cascos: la visera.
En aquella oportunidad, Un amortiguador del sistema de suspensión del coche de Rubens Barrichello salió rebotado por la pista y golpeó contra la visera de Massa. Este piloto retirado en 2013, quedó internado inconsciente y en coma por varios días. Luego de esta experiencia, se hicieron que los cascos fueran a prueba de bala, al adicionarles una tira de Zylon. Uno de los test obligatorios de cada casco fabricado para la F1 es el de lanzarle una bala a la visera a 50 km/h. Además, debe ser capaz de soportar durante 30 segundos hasta 800º de temperatura.