De ganar el Mundial del 98 a vender piscinas: la trágica historia de Stephane Guivarc’h

Messi la buscó durante toda su carrera y lo consiguió. Otros antes de él quizá lucharon menos, pero para nada es sencillo ser Campeón del Mundo; sin embargo, hay una vida después el alzar el dorado trofeo. Por ejemplo, este jugador pasó De ganar el Mundial del 98 a vender piscinas, la trágica historia de Stephane Guivarc’h.

Guivarc’h nació el 6 de septiembre de 1970 en Finisterre, Francia. Jugó como delantero y destacó al ser el máximo artillero del campeonato galo en 1997 y 1998. Inició su carrera profesional en el Stade Brestois, después pasó por equipos como EA Guingamp, Auxerre, Stade Rennais, Newcastle de Inglaterra y Rangers de Escocia.

¿Stephane Guivarc’h vende piscinas?

• Dentro de su palmarés es está una Ligue 1, una Copa de Francia, una Premier League de Escocia y una Copa de la liga de Escocia.
• Debutó con la Selección de Francia el 11 de octubre de 1997 contra Sudáfrica y anotó gol; sin embargo, con el tiempo, ese fue el único tanto que marcó con los galos.
• Para el Mundial de 1998, el DT Aimé Jacquet lo consideró dentro de los 22 elementos para representar a Francia.
• Fue titular en 6 de los 7 partidos, incluida la final, pero no pudo marcar gol.
• En el duelo por el título contra Brasil, fue substituido por Christophe Dugarry en el minuto 66, pero alzó la copa.
• Con 53 años, ahora el francés se dedica a algo muy diferente al futbol porque es vendedor de piscinas.
• Es miembro de la empresa Tanguy Piscines Bretagne, cuyo dueño es uno de sus amigos.
• En entrevista para RMC, contó que tras estar desempleado, su amigo le ofreció este empleo como representante de ventas y ahora “lleva una vida equilibrada”, sin necesidad de una cámara para existir.
• “Llevo 17 años en el negocio de las piscinas. El jefe de la empresa es amigo mío, que me dijo que estaba pensando en crear una división de piscinas y que estaba buscando un representante de ventas. Como entonces estaba desempleado, le dije que le echaría una mano y, 17 años después, sigo con él”, explica Guivarc’h a RMC.
• Indicó que pasa todo el día viajando y por la noche regresa a casa; sin embargo, la gente no se olvida de él.
• El galo contó que como su número de teléfono está en internet, a veces la gente le habla no para contratarlo, sino para cantarle el himno del Mundial de Francia, I Will Survive.

Aunque pueda parecer triste, quizá para él es la vida perfecta. Sin becesidad de esconderse ni nada. Stephane Guivarc’h pasó de de ganar el Mundial del 98 a vender piscinas y está contento.