Si bien dijo no tenerlo claro, expresó que aprovecha al máximo cada momento ya que no sabe cuándo se terminará su historia. También reveló los motivos por los que decidió irse a Miami y cómo vive este sorpresivo presente.
A los 36 años, jugará hoy a las 18 (hora de México) la semifinal de la US Open Cup ante Cincinnati. Será el octavo partido como jugador de Inter Miami y tiene otros tres en agenda. El 26 de agosto ante New York RB, como visitante, en la reanudación de la MLS, luego recibirá a Nashville, de local, el 30 de agosto, y el 3 de septiembre jugará contra Los Ángeles FC, nuevamente afuera.
“A mí me gusta jugar, disfruto de estar con una pelota, de estar adentro de la cancha, de competir y de los entrenamientos”.
“No sé cuánto más voy a jugar pero intentaré aprovechar hasta que pueda, hasta que esté bien y después veré”.
“Para el después, hay tiempo de pensar, analizar y elegir. Hoy lo más importante es disfrutar de lo queda, sea poco o mucho pero al máximo”.
Messi liderará al equipo de Gerardo “Tata” Martino en uno de los partidos más difíciles de esta nueva etapa ya que visitará al actual líder de la Conferencia Este de la MLS, que perdió el domingo (3-0 ante Columbus Crew, de visitante) en el reinicio de la liga pero se mantiene en lo más alto de la tabla con 51 puntos en 24 partidos, a 33 de ventaja sobre Inter Miami (tiene dos encuentros menos).
Si Inter Miami avanza y el ganador de la otra llave es Houston Dynamo, el equipo de Messi será local en su estadio de Fort Lauderdale, mientras que si pasa Real Salt Lake jugará la final como visitante en el estadio del estadio de Utah.
