Silvia Pinal: Cuadro de Diego Rivera no irá a casa de Origel sino a este famoso lugar

Con la reciente extorsión en contra de una de las empleadas de doña Silvia Pinal para que entregara las joyas de la famosa, Sylvia Pasquel reveló que en casa de la famosa no hay diamantes, pues todas las alhajas se encuentran guardadas en el banco por precaución.

Sin embargo, algunos medios de comunicación advirtieron a la famosa que debería tener más seguridad en su propiedad, pues a pesar de no tener joyas, si hay muchas cosas de valor, como el cuadro que pinto Diego Rivera en su honor y que podría valer miles de dólares.

Dicha obra fue un regalo del pintor hacia la famosa, de quien se dice quedó sorprendido por su belleza cuando la conoció, y aunque le propuso pintarla desnuda, Pinal se rehusó y le pidió que mejor le hiciera una pintura más recatada.

Hace algunas semanas, dicha obra causó polémica ya que Juan José Origel bromeó con que la diva del Cine de Oro Mexicano le había dicho que se la regalaría cuando falleciera y que incluso ya estaba estipulado en su testamento.

Sin embargo, ya se dio a conocer lo que sucederá con dicho cuadro. Fue en el programa Sale el Sol donde hablaron del destino de la obra de Diego Rivera.

Gustavo Adolfo Infante afirmó que "la Guzmán es lo único que quiere", sin embargo, fue Alex Kaffie quien afirmó haber hablado con el notario que realizó el testamento de Silvia y en éste dice que la famosa pieza pasará a ser parte del "Pueblo de México", pues su deseo es que sea custodiado por el Museo Dolores Olmedo.

"El cuadro no se le va a quedar a ninguno de sus hijos, yo conozco al notario, y en su momento, doña Silvia lega ese cuadro al pueblo de México y una de sus voluntades es que lo custodie el Museo Dolores Olmedo", el cual se encuentra en Xochimilco, al sur de la Ciudad de México.

Silvia Pinal posó para Diego Rivera en 1956

Era el año de 1956, cuando Silvia Pinal iniciaba su trayectoria en la Época de Oro del Cine Mexicano, ella tenía sólo 25 años y tuvo la oportunidad de interactuar con el pintor y muralista Diego Rivera.

El encuentro entre la actriz y el pintor habría ocurrido gracias a un amigo en común, un arquitecto que trabajaba en un proyecto de la casa de Pinal. Tras una larga plática, el muralista le comentó a la famosa que sería una extraordinaria musa para un retrato al desnudo, propuesta que Silvia declinó, pero le dijo que estaría dispuesta a modelar para algo más recatado.