Alberto del Río organizador del evento informó que todo quedaría cancelado debido a que no notó seriedad por ninguna de las partes, además de que se enteró que tanto Adame como Trejo contaban con el mismo representante, o al menos eso es lo que le habrían comentado.
Durante una entrevista con Gustavo Adolfo Infante para su programa de Primera Mano, comentó: "Yo sé que esto es algo que creó mucho interés en el público, es algo que pudo haber sido de un impacto tremendo... yo estaba comiendo con Carlos Trejo el día del incidente de Alfredo Adame, dije bueno a lo mejor es el momento en el que se puede retomar esta idea que tenían".
Alberto del Río comenzó a buscar patrocinadores antes de ofrecerles algo a ambos, por lo que una vez contando con todo habló con Adame y con Trejo: "Empecé a hablar con la gente adecuada y con la alianza que tengo con la gente de Sultanes de Monterrey encontré que pudiéramos hacer el evento en el estadio, teníamos la publicidad de parte una televisora local y tenía montados más de cinco patrocinadores".
Alfredo Adame obtendría medio millón de pesos por la pelea
"Empezamos a darle vueltas, traté de localizar al señor Adame, hasta que una persona que se presentó como prensa me dijo que ella me podía poner en contacto con él, le mandé un audio que le llegó a Adame y le dije, 'mira, yo veo aquí oportunidad de hacer negocio, ¿te interesa?, te voy a pagar medio millón de pesos por subirte a pelear dentro de una jaula con Carlos Trejo, si te interesa comunícate conmigo".
Posteriormente, ambos pactaron la pelea en un programa de Monterrey, hasta que él empezó a notar poca seriedad en el asunto: "Se comunica la persona esta, Ivonne, y me dice: 'Soy la RP de Carlos Trejo y de Alfredo Adame', le digo '¿no que eras prensa y que no tenías nada qué ver con ellos?' y me dice 'bueno no, soy su RP"
La mujer también se habrá presentado como abogada y "me exigió que le mandara los contratos, le dije que en el mundo de los negocios las cosas no se hacen así, que yo necesitaba que las dos partes firmaran un acuerdo de confidencialidad, antes de sentarme a negociar con ellos, después de esto hacer una carta compromiso para que ellos tuvieran repercusiones tanto económicas como legales, si no se hacía la pelea porque yo ya estaba gastando".
Sin embargo, Del Río tomó la decisión de cancelar todo al no poder contactar directamente a los involucrados: "Yo cancelé todo por la falta de seriedad. Esta no es una pelea del gran Canelo que vamos a esperar por dos años, es una pelea de morbo que nos interesa porque nos encanta el chisme, pero dentro de dos semanas esto va a estar muerto, a la cuarta a nadie le va a interesar".
"Hoy por hoy a la gente de Sultanes no le interesa, se me echaron para atrás tres patrocinadores, a la televisora ya no le interesó. No hay seriedad y yo tengo una amistad con Carlos Trejo y por respeto a él le avisé que me deslindaba del acuerdo, porque soy un empresario, pero ninguno de los dos tenían interés de pelear, más que de enviarme a diversos lugares a hablar con varias personas pero con cámaras por todos lados", finalizó.
