El queso azul, conocido por su elaboración única, olor intenso, y textura suave, es un alimento que ha conquistado los paladares de muchos. Este tipo de queso, famoso por su proceso de fermentación con mohos específicos, se caracteriza por su sabor distintivo y un perfil nutricional que puede tener tanto beneficios como riesgos para la salud.
Entender los efectos de su consumo diario es esencial para quienes disfrutan de este manjar con frecuencia.
¿Qué tan sano comer es el queso azul todos los días?
Los quesos azules son ampliamente apreciados, especialmente por su sabor intenso y distintivo, con variedades como el Roquefort y el Gorgonzola liderando la lista de los más reconocidos.
A pesar de su popularidad, algunas personas se preguntan si es seguro consumir quesos que contienen mohos, dado que comúnmente se considera que los mohos son perjudiciales para la salud.
Los quesos azules se elaboran utilizando “buenos mohos”, como Penicillium roqueforti, que se integran en su interior durante la elaboración. Este moho es el responsable del color y del característico sabor del queso azul.
En contraste, quesos como el Brie y el Camembert, que también son quesos de pasta azul, desarrollan mohos en su corteza externa, conocida como “corteza florida”.
Este moho, de color blanco y textura suave, puede ser eliminado al cortar la corteza. Por otro lado, el moho “malo” en los quesos suele aparecer en productos frescos que se han almacenado inadecuadamente, como el requesón.
Este tipo de moho puede variar en color, generalmente azul o verde claro, y su presencia indica que el queso ya no es seguro para el consumo. Es esencial evitar ingerir estos mohos, ya que pueden causar problemas de salud, desde malestar gastrointestinal hasta reacciones alérgicas.
¿Cómo se llama el hongo o moho del queso azul?
El hongo responsable de la característica coloración y sabor del queso azul se llama Penicillium roqueforti o Penicillium glaucum, dependiendo del tipo de queso.
Estos quesos son ricos en nutrientes como magnesio, calcio, potasio y vitaminas del complejo B, también contienen altos niveles de sal y grasas saturadas.
Aunque pueden ofrecer beneficios para la flora bacteriana, su consumo excesivo no es recomendable, especialmente para personas con colesterol alto o problemas cardiovasculares.
Es recomendable disfrutar del queso azul en pequeñas cantidades, no superando los 30 gramos al día.
¿Qué diferencia hay entre el queso roquefort y el queso azul?
El queso azul es un término genérico que se refiere a cualquier queso que utiliza mohos para darle su característico sabor y textura suave, pudiendo elaborarse con diferentes tipos de leche, como la leche de vaca o de cabra.
Origen del nombre:
El queso Roquefort es un tipo específico de queso azul que se elabora exclusivamente con leche de oveja en la región de Roquefort-sur-Soulzon, Francia.
El nombre “Roquefort” proviene de esta región, y su elaboración del queso azul implica la maduración en cuevas naturales, donde se desarrolla el moho Penicillium roqueforti.
¿Cómo se hace el queso azul o Blue Cheese? Recetas e ingredientes
Durante la elaboración del queso azul, la leche se cuaja y se corta en pequeños trozos para drenar el suero. Luego, se inyectan las esporas de moho en la cuajada antes de prensar y madurar el queso.
Durante el proceso de maduración, los quesos se perforan para permitir la entrada de oxígeno, lo que facilita el crecimiento de los mohos y el desarrollo del característico sabor y la textura suave del queso de pasta azul. Esta técnica también es la base para preparar deliciosas salsas de queso.
¿Cuánto dura el queso azul en la nevera?
El queso azul puede durar entre 3 y 4 semanas en la nevera si se conserva adecuadamente, envuelto en papel encerado o en un recipiente hermético para mantener su frescura. Dado que es un queso con alto contenido de sal y mohos, su vida útil es más prolongada que la de otros quesos frescos.
Su olor intenso y la presencia de mohos naturales pueden intensificarse con el tiempo, por lo que es importante verificar su estado antes de consumirlo.
El queso roquefort, por ejemplo, es una excelente opción que puede mantener su calidad durante este período si se almacena correctamente.
Aunque el queso azul, con su textura suave y su característico olor intenso, puede ser una delicia en la dieta diaria, es importante consumirlo con moderación. Conocer los efectos de su elaboración y los componentes que lo conforman puede ayudarte a tomar decisiones informadas sobre su consumo regular.
Lic. en Comunicación social (UNCuyo) y Dirección y Producción Audiovisual (Universidad de Congreso). Con Experiencia en Producción y edición de video en radio, televisión y Streaming; Redacción para Sitios Web deportivos desde hace 5 años. Community Manager y Filmmaker en Competencias de Rap. Apasionado por el futbol y la música.
