¿Es posible nieve en el desierto? En el de Sahara sí ¡pero no en México!

Es posible que en un lugar tan árido como el desierto del Sahara caiga nieve, un fenómeno climático extraordinario que desafía las expectativas más arraigadas sobre las condiciones del desierto.

Sin embargo, en contraste, México enfrenta fenómenos climáticos extremos, como ‘El Niño’, que eleva las temperaturas hasta los 50°C.

Este contraste nos lleva a preguntarnos por qué ocurren tales fenómenos opuestos en diferentes partes del mundo y cómo la naturaleza sigue sorprendiéndonos con su variedad y complejidad climática.

¿Por qué nieva en el desierto del Sahara?

• El aire del desierto es extremadamente seco, lo que favorece la rápida condensación del vapor de agua cuando este llega a la zona.
• A pesar de las altas temperaturas diurnas, las noches en el Sahara pueden ser muy frías, especialmente en las zonas elevadas.
• Ocasionalmente, masas de aire húmedo provenientes del océano Atlántico, el Mediterráneo o la cordillera del Atlas llegan al desierto de Sahara.

• El desierto del Sahara se encuentra a mayor altitud que la mayoría de los desiertos de México, lo que facilita que la temperatura descienda por debajo del punto de congelación.
• La primera nevada registrada en el Sahara se remonta a 1979
• Desde entonces se observaron nevadas en 2016, 2017, 2018, 2021 y 2022.
• En 2018, la acumulación de nieve llegó a alcanzar los 30 centímetros.

La presencia de nieve en el desierto del Sahara, aunque excepcional, nos muestra la capacidad única de la naturaleza para sorprendernos con fenómenos climáticos inusuales.

Mientras que en regiones como el Sahara la combinación de temperaturas nocturnas bajo cero y humedad ocasional del Atlántico pueden dar lugar a nevadas esporádicas, en México, conocido por sus estados mas calurosos , tales eventos son prácticamente inconcebibles.