El emocionante momento se produjo cuando un niño le preguntó directamente a Kate Middleton a qué equipo seguía, obteniendo una respuesta espontánea que generó una conexión instantánea: ambos eran fanáticos del Chelsea.
La sorpresa y la camaradería quedaron evidentes cuando el niño animó a la duquesa a chocar los cinco, compartiendo la emoción de ser seguidores del mismo equipo de futbol.
La visita de Kate Middleton al centro de salud mental para niños no solo reveló su preferencia futbolística, sino que también dejó espacio para anécdotas divertidas, como la situación en la que no pudo tocar los tambores debido a su elegante vestido de Alexander McQueen.
A pesar de no poder participar plenamente en la actividad musical, Kate se divirtió junto a los niños, mostrando su disposición para disfrutar de momentos auténticos y relajados.
La anécdota de los tambores fue compartida por uno de los pequeños presentes, quien destacó el sentido del humor y el ritmo de la duquesa durante la experiencia.
La sinceridad y espontaneidad de Kate Middleton durante la visita permitieron ver una faceta más cercana de la duquesa, alejada de su distinguido rol, compartiendo risas y momentos genuinos con los niños.
La conexión entre Kate Middleton y los pequeños, es tan fuerte como su lado deportivo, lo que se demuestra por la revelación de su equipo de futbol favorito y las divertidas anécdotas, resaltan la autenticidad y la calidez de la duquesa durante esta conmovedora visita.
